La mayoría de las personas pensábamos que tras la caída del muro, la antigua República Democrática Alemana dejó de existir en 1990. Pues parece ser que no, la RDA existe, y en un clima muy confortable entre palmeras y exuberantes playas de una pequeña Isla del archipiélago cubano. Quizás fue el último territorio oficial de la vieja Deutsche Demokratische Republik llamada Cayo Blanco del Sur.

Desde 1960, Cuba se convirtió en una función de los estados del bloque del Este, la RDA tenía relaciones estrechas con la isla socialista del Caribe. RDA y Cuba fueron dos hermanos, pero muy diferentes….

A medida que las tropas lideradas por Estados Unidos comenzaron su poder de invasión, Fidel Castro en La Habana, no tenía realmente claro que la revolución de sus combatientes guerrilleros barbudos, fuera suficiente para contrarrestar el poder de los Estados Unidos. Tras la ruptura y el embargo comercial contra Cuba, Castro anunció oficialmente la alianza con el bloque soviético incluyendo también la RDA como socio de alternativas económicas.

“Estamos muy contentos con el gran interés de la RDA para ampliar las relaciones comerciales con Cuba”, dijo el ex-ministro de Industria Ernesto Che Guevara tras la firma en Leipzig (1962) firmando con evidente satisfacción. Ese mismo año estudiantes cubanos comenzaron a llegar a la República Democrática Alemana, por el contrario ingenieros y científicos alemanes comenzaron a ser enviados a la isla tropical.

Eran sociedades muy diferentes con respecto a la idea del socialismo. A partir de 1968 el tratado estaba a pleno rendimiento, la RDA ayudó a construir el sistema educativo y a reestructurar las plantas industriales en crisis, además de realizar grandes donaciones en motores y máquinas. En pleno embargo, la compra de azúcar y cítricos cubanos a precios inflados hacía pensar que los alemanes soñaban y de que manera con los trópicos.

En junio de 1972 en una visita de Estado a Berlín Oriental, Castro ante los ojos de la dirección del SED, sacó un mapa y lo extendió solemnemente, señaló una pequeña isla en la bahía de cochinos y en prueba de agradecimiento por las estrecha colaboración entre dos hermanos, regaló el pequeño archipiélago y la renombró como la isla de  Cayo Ernesto Thaelmann en honor a un político comunista alemán. Además la playa del sur de la isla pasaría a llamarse “Playa RDA“. Para sellar la entrega Castro y Erich Honecker firmaron conjuntamente una tarjeta. “Amistad firme entre Cuba y la RDA”.

Dos meses más tarde, el embajador de Alemania Oriental en Cuba erigió en ella un busto de 4 metros de altura de Ernst Thälmann. La isla con 15 kilómetros de largo por apenas 500 metros de ancho, es una zona de exclusión militar en el Golfo de Cazones, al suroeste de la famosa Bahía de Cochinos. Una zona deshabitada donde acoge varias especies en peligro de extinción y algún que otro turista en ocasiones.

Los británicos, los franceses y los portugueses tenían sus islas coloniales, porque no puede ser posible para Alemania. La misma noche la revista de Berlín Thema1 en exclusiva:

“El 17 Estado lo tenemos en Cuba, Fidel Castro nos dio una soleada isla y por tanto pertenece al cesionario de la RDA”.

La dirección de la RDA rápidamente se apoderó de la isla con un nombre poco común para el Caribe. La expectación fue tal que la televisión alemana mandó en marzo de 1975 a el famoso cantante Frank Schöbel a Cuba para realizar algunas grabaciones de vídeos musicales. En aquel entonces su canción “Una isla en el golfo de Cazone” y aquellas risas sobre la estatua de Thalmann fueron de total éxito entre las juventudes de la Alemania Oriental.

Tras la caída del muro, el renovado interés por parte de la reunificada Alemania capitalista avergonzó a Cuba, que negó a los periodistas alemanes el acceso a la isla y declaró que el cambió de nombre y la transferencia de 1972 fue un “acto simbólico” por lo que sigue siendo parte de Cuba. -Se acabó lo que se daba-.

En 1998, la isla fue severamente castigada por el huracán Mitch, y al igual que ocurrió con la extinta RDA, el busto de Ernest Thälmann fue derribado. Quizás falten algunos derribos más…

Más información en Spiegel online, en DW, en Secretos de Cuba y en Wikipedia

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