¿Tienes una vida caótica últimamente? Pero sabes que una pizza, patatas fritas o un dónut sólo te van a quitar la presión del trabajo momentáneamente, ¿no? Los Alimentos grasos son de digestión lenta y hacen que te sientas más pesada durante más tiempo. Además, tienen un alto contenido en azúcares, cosa que puede afectar negativamente a tus niveles de energía. Así que si quieres ser más feliz y llevar una vida más saludable, fuera la comida rápida.

A este alimento lo han llegado a apodar “fruta mágica” porque contiene un tipo de azúcar no digerible para el cuerpo. Cuando el azúcar pasa por el intestino grueso, éste no es capaz de digerirlo y desafortunadamente, se transforma en gases. Por eso, recomendamos bajar o eliminar la ingesta de alubias antes del gran día, y elegir otras fuentes de proteínas como el pollo o el pescado.

Aunque no todo el mundo es sensible a los productos lácteos, es uno de los problemas más comunes ya que suelen dar gases, pinchazos o malestar. 

La única excepción a esta regla es tomarte un yogur griego ya que ayudan al cuerpo a digerir más eficientemente.

Puedes pensar que estás haciendo algo bien cambiando el azúcar natural por edulcorante, pero no corras tanto. Los edulcorantes son difíciles de digerir para muchas personas, lo que lleva al hinchazón y malestar.

Los alimentos salados son un NO definitivo.  ¿Por qué? Porque el sodio hace que se retengan líquidos y esto hace que te sientas muy hinchada. Intenta no consumir más de 2.300 mg de sodio al día.

Al igual que los lácteos, el gluten no afecta negativamente a todo el mundo, pero es otro alimento que es conocido por crear gases e hinchazón en mucha gente. Para asegurarte de que no te sucede esto, elimina el gluten una o dos semanas antes del día para ver si tiene algún efecto en tu sistema digestivo. Sólo debes asegurarte de comer fibra de otros alimentos para tener más feliz a tu estómago.

Coca Cola, agua con gas, champán – cualquier bebida que tenga burbujas, déjala. Las burbujas de todas estas bebidas son dióxido de carbono, y la liberación de éste hace que uno se quede con gases y la sensación de estar hinchado. Bebe agua siempre.

Cualquiera que se haya emborrachado alguna vez en su vida puede decir cómo se siente la mañana siguiente (sobretodo si son cócteles con mucho azúcar). El azúcar del alcohol debilita el sistema digestivo y puede hacerte pasar muy malos ratos, así que tu mejor opción es dejar de tomarlo.

Al principio sólo vas a querer cuidar tu alimentación para sentirte bien, pero una vez te acostumbres verás que es la mejor decisión que podrías haber tomado.

La próxima vez que necesites un toque de aire fresco en tu boca, no te comas un chicle. Dejando aparte el hecho de que muchas variedades contienen altas cantidades de azúcar, masticar chicle hace que engullas más y por lo tanto que tragues aire innecesario que se queda hinchando tu vientre.