Tal vez hayas notado que después de varios usos, tu sartén, que una vez tuvo una base plana, ahora tiene una forma curva.

Ya no calienta igual, porque el abultamiento hace que ya no se siente bien sobre la parrilla, o bien, que ciertas áreas están más cerca o más lejos del calor.

Tristemente, este tipo de abultamiento es bastante común en los Sartenes y en las bandejas para hornear.

En este artículo verás por qué las sartenes se deforman y cómo prevenirlo para prolongar su vida útil.

¿Por qué los sartenes se deforman?

Las sartenes se pandean principalmente debido a cambios extremos de temperatura. Cuando una sartén se calienta rápidamente a alta temperatura, se expande, y cuando se enfría rápidamente, se contrae. Si el sartén se somete a estos cambios de temperatura de manera brusca, o repetidamente, se puede deformar.

Además, el calor desigual puede hacer que una parte de la sartén se expanda más que la otra, lo que puede provocar una deformación, como cuando lo pones en una parrilla más chica que su diámetro.

Este fenómeno no es exclusivo de los sartenes, puede pasarle a cualquier cosa que pongas sobre la estufa o en el horno: ollas, cacerolas, bandejas, planchas de cocina, etc.

Es probable que alguna vez horneando algo, te haya toca escuchar un ruido, o tronido, pues es justo el momento en el que la bandeja se ha pandeado.

¿Es seguro usar una sartén abombada?

El principal problema de cocinar con una sartén deformada es que el calor ya no se distribuye uniformemente. Lo que resulta en alimentos quemados de un lado y crudos del otro.

Molesto, no?

Si embargo, si el sartén pandeado no se sienta firmemente en la parrilla de la estufa, entonces si puede representar un riesgo considerable.

Comúnmente, el pandeamiento sucede abombando el fondo hacia arriba, dejando un hueco entre la parrilla y el fondo del sartén. Los sartenes abombados de esta manera por lo regular se mantienen firmes en la estufa.

Caso contrario, cuando los sartenes se deforman hacia abajo, donde la curva del fondo toca la parrila, y el sartén queda “bailando” sobre la parrilla. Los sartenes deformados así, deben dejar de ser utilizados y reemplazados.

La buena noticia es que hay maneras de prevenir la deformación de las sartenes.

En la siguiente sección veremos las razones más frecuentes por las que esto sucede.

5 Causas comunes del pandeamiento y como evitarlas

Las deformaciones de las sartenes puede ocurrir debido a varias razones, conocerlas y entenderlas es una de las mejores formas de prevenir que suceda.

Las 5 principales son:

#1 Choque de calor: Poner el sartén caliente al chorro de agua fría

Los cambios rápidos de Temperatura hacen que el metal se expanda o contraiga a diferentes velocidades, lo que dará como resultado una deformación. Esto puede suceder cuando intentas lavar el sartén caliente poniéndolo al chorro de agua fría inmediatamente.

Para evitar este choque térmico, deja que el sartén se enfríe antes de lavarlo.

La mayoría de los fabricantes advierten sobre esto en sus instrucciones de cuidado.

Si en lugar de lavar el sartén, quieres aprovechar para hacer una base con lo que quedó pegadito en tu última preparación, entonces, baja la temperatura del sartén, y ve vertiendo los líquidos que vayas a usar (agua, vino, algún caldo) de poco en poco, y siempre a temperatura ambiente.

#2 Calentamiento desigual: Usar una parrilla más chica que la base del sartén

De manera similar, calentar una sección del sartén más que otra, provoca que estas zonas se expandan a diferentes velocidades dependiendo de su proximidad al calor. Esto provoca estrés térmico, ocasionando una deformación de esa área.

Cuando colocas un sartén mucho más grande que el tamaño de la parrilla, se calentará solo el centro de la base del sartén, ocasionando estas diferencias de temperatura con el resto del cuerpo del sartén.

En caso de que ninguna de tus parrillas sea suficientemente grande para tu sartén, entonces cuida como calientas el sartén. Evita usar temperaturas altas, para darle suficiente tiempo a que el calor sea distribuido de manera uniforme por todo el sartén.

#3 Sobrecalentamiento: Calentarlo mucho, muy rápido

Cuando los sartenes son sobrecalentados muy rápidamente, también corren el riesgo de deformarse.

La razón es porque al estar tan caliente y al entrar en contacto con un alimento o líquido, inevitablemente sufrirá un choque de temperatura.

Lo ideal es cuidar la temperatura a la que precalentamos los sartenes y evitar dejarlos vacíos mucho tiempo mientras se precalientan.

Para precalentar correctamente tu sartén siempre comienza con temperatura media y no dejes desatendido el sartén, enseguida agrega un poco de aceite, déjalo calentar un poco y finalmente coloca los alimentos.

Ahora bien, para preparaciones que requieren alto fuego, como para sellar una carne o dorar algo, lo recomendable es comenzar con temperatura media, colocar la carne o alimentos a preparar a temperatura ambiente, de modo que evitas una diferencia grande de temperatura entre ellos.

Posteriormente, comienza a elevar la temperatura hasta el punto deseado.

#4 Dureza del material: Aluminio / Cobre VS Acero Inox / Hierro

El aluminio y cobre tienen una menor dureza comparada al acero inoxidable o al hierro fundido, y esto los hace mejor conductores del calor. Esto se debe a que su estructura molecular es más flexible, y esto ayuda que la transferencia de calor sea más rápida y eficiente.

Sin embargo, esta es la misma la razón que los hace más sensibles a los cambios buscos de calor.

Estos materiales pueden expandirse y contraerse con mucha mayor facilidad, por lo que un ligero cambio de temperatura puede suficiente para que este tipo de sartenes se abomben.

Contrariamente, los materiales como el aluminio anodizado, el acero inoxidable o el hierro fundido, son más duros, su estructura molecular es mucho más rígida y, por lo tanto, se calientan más despacio.

Los sartenes de fabricados con estos materiales son más resistentes a los cambios de calor, y requerirán de un choque de calor mucho más brusco para pandearse.

Puedes hacer un check rápido revisando las revisiones de los clientes de Amazon, y verás que es común ver quejas sobre deformación de los sartenes de aluminio, a diferencia de los fabricados con otros materiales más duro.

#5 Espesor del Material: Sartenes con cuerpo delgado

Los sartenes fabricados con materiales de bajo espesor, serán más propensos a deformarse y a pandearse también.

Esto debido a que por espesor delgado requerirán menos calor para expandirse y contraerse, por lo que los hace más susceptibles a los daños por cambios de temperatura.

Para darte una referencia, un sartén de espesor delgado se considera igual o menos a 2.5 mm.

Los sartenes de buena calidad, aun siendo de aluminio, son gruesos para darle una mayor resistencia y durabilidad.

Los mejores sartenes que no se pandean

Si estás en la búsqueda de un buen sartén para olvidarte de este tema del pandeamiento, te dejo aquí estas recomendaciones:

Preguntas Frecuentes

Conclusión

Darte cuenta de que uno de tus sartenes favoritos se pandeó es bastante frustrante, pero afortunadamente es prevenible.

Para evitar sartenes abombados en tu cocina, lo principal es no someterlos a cambios rápidos de temperatura, asegúrate de que se calienten uniformemente, e invierte en sartenes de buena calidad (materiales como acero inoxidable o aluminio anodizado, con espesores superiores a los 2.5 mm).

Siguiendo estas simples recomendaciones, puedes extender la vida de tus sartenes por mucho tiempo y disfrutar cocinando sin preocupaciones.