Vivir encerrado no es una elección para quien está internado en un hospital psiquiátrico, es una realidad impuesta por otros. En el neuropsiquiátrico más grande de la Argentina (institución mítica conocida como “el Borda”) donde viven unos 1300 pacientes, existe un único servicio cerrado con veinte Mujeres internadas. A partir del acercamiento sostenido y filmando desde la premisa de un