El 11 de Septiembre, a parte de ser la fiesta nacional catalana, es uno de los días tradicionales del viejo calendario japonés en el que se cambiaba de estación. Se dice Nihyaku Hatsuka (220 días) porque se celebra justamente 220 días después del equinocio de primavera, llamado risshun. Se instauró el 11 de septiembre (10 de septiembre en los años bisiestos) a principios del siglo XXI, y es cuando el clima empieza a empeorar dejando ya sí de lado el tan caluros y húmedo verano japonés, aunque esté es uno de los tres días con más mala suerte para los agricultores. Meteorológicamente hablando, empieza a soplar los vientos fuertes (que algunos se convertirán en tifones). Seguir leyendo el post