Ayer hubo Debate a tres en la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

Debate a tres. A tres candidatos que optan a la Secretaria General del Partido. Bueno, solo dos, porque Patxi está puesto por los bucaneros -mejor los llamamos varones- para que intente ganar votos que después pasaran a la candidata Susana, restándoselos a Pedro Sánchez. Complicada la trilogía. Pero es la política entre mucho, tal vez demasiado, compañero.

Mientras duró el debate tengo que confesar que no supe ver donde estuvo el programa para proponer a la militancia una futura forma de gobierno, ni la estrategia para llegar a gobernar el país y mucho menos el trabajo para unir a los militantes y simpatizantes en las urnas en pos al partido.

En cuanto a la unión de la izquierda me parece a mí que esos señores, y señora, no saben lo que significa, ya que la impresión que obtuve es que interpretan la unión como la supeditación a su partido, el PSOE. No creo que eso sea unión, sino desunión. Como máximo, es sumisión y resignación de otros, a los que nadie les puede negar que son izquierda. Lo siento pero no estoy de acuerdo. No deseo esa izquierda.

Susana Díaz, parece no entender que unir al partido no pasa por extender el dedo índice y decir, tú, a callar. Señora candidata, eso no es unidad. Es mi opinión, la impresión que obtuve.

El candidato opositor a la Presidenta de Andalucía, Pedro Sánchez, pareció no tener muchas ganas de ganar la secretaría. Quizás sepa que si gana los varones le harán la vida política insoportable, como ya se la hicieron.

Patxi está en medio de los dos y sabe que está ahí para intentar que no se vea el enfrentamiento entre los otros candidatos, y como ya he dicho para dar votos a Susana y restarlos a Pedro.

Seguramente ganarán los varones, y Susana Díaz Secretarío General.

Patxi López se irá a su casa con algún cargo, puede que para vegetar, lo que es una lástima el despreciar de esa manera el mejor cargo político de los tres. Es mi punto de vista.

¿Y Pedro López? Veremos lo que hacen con él. Podría ser que si hay división interna –que la habrá- y escisión, la encabece y . . . . rumbo hacía Podemos. La solución, los próximos días; después del domingo 21.