Es uno de los científicos más brillantes y conocidos del planeta. Ha logrado escribir libros, y dar conferencias, a pesar de estar casi totalmente paralizado por una enfermedad. Y todo gracias a la tecnología. Pero la máquina que permitía a Stephen Hawking ser quien es, no se había actualizado, ni mejorado, en las últimas dos décadas. Tras tres años de trabajo diario junto a Hawking, la