Esta Navidad el regalo ha sido un libro para conocer y profundizar un Poco más en la cocina Francesa, gastronomía que conozco poco y que en ocasiones me ha resultado un poco complicada y por eso no me he atrevido a preparar algunos platos.

El libro que tengo en mis manos no tiene edición en Español (sólo lo podéis encontrar en Inglés o Francés), y se parece mucho a La Cuchara de Plata Italiana, las recetas vienen explicadas en pocas líneas de forma sencilla y hace un repaso de todo lo fundamental de la cocina del país Galo. Al ser cortas las descripciones se hace más sencillas las traducciones para entender y realizar las recetas. 

Me he decidido por un plato de berenjenas, verdura que me encanta comer en cualquier época del año. Queda muy sabrosa como la prepararemos hoy, acompañada de una buena salsa de tomate y aromatizada con ajo y perejil. Conozcamos la receta.

Comenzamos lavando y troceando los tomates en dados. Por otro lado también limpiamos las Berenjenas y cortamos en rodajas no muy gordas. 

En una sartén vamos a pochar los tomates en aceite de oliva, a los cuales le añadimos un poco de sal. En otra sartén con aceite freímos poco a poco en tandas las rodajas de berenjenas hasta que veamos que quedan bien tiernas. Retiramos y ponemos sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite.

Una vez frito el tomate vamos a ir montando el plato. Usaremos un molde apto para horno y colocaremos una capa de tomate, por encima una de berenjenas que salpimentamos, el ajo troceado y perejil, de nuevo otra capa de tomate y terminamos con una de berenjenas. Ponemos trocitos de mantequilla por encima y horneamos a  160 grados durante unos 30-35 minutos. Servimos bien caliente.