Este nuevo mundo de la tecnología y el alcance inimaginable de la red cibernética, ofrece la oportunidad de alcanzar la atención de millones de seres humanos a través del Universo, desde la comodidad de mi oficinita en mi hogar.  Como es lógico, no sé si mis artículos serán leídos por millones, miles, cientos ó solo docenas de amistades y familiares... pero no me importa. Tengo que ser sincero conmigo mismo, a estas alturas en mi vida no busco fama, empleo, reconocimiento ni aspiraciones de tipo político. Tengo que dar para atrás (rewind) a mis origenes para encontrar la respuesta al título de este artículo: RAZONES POR LAS QUE ESCRIBO.


Siendo muy jóven y carente de experiencia, me ví envuelto, mientras desarrollaba como ser humano frente a una situación para la cual no estaba preparado... era la segunda mitad en la década de los 50's y durante esta época yo era un adolescente, terminando mis estudios secundarios, muy enamorado de mi novia Martha (actualmente mi esposa de más de medio siglo) y como es natural tratando de encontrar el camino a seguir con relación a carrera laboral para el sostenimiento de la familia que queríamos iniciar mi prometida y yo.

Somos nativos de la ciudad de La Habana, Cuba y durante el período de tiempo comprendido entre los años 1955 y 1959 acabé mis estudios y después de graduarme inicié mi carrera en la industria Bancaria. Nuestra pequeña Isla sufría momentos díficiles en el campo de la política. El Gobierno en el poder era de tipo militarista y habían asumido el control del mismo por medio de un Golpe de Estado al poder demócratico electo en libre sufragio por el pueblo cubano... Como protesta a este régimen militar un pequeño grupo de rebeldes, procedentes de las aulas universitarias comenzó a luchar para conseguir el derrocamiento de la dictadura militar de Fulgencio Batista Zaldívar. Este grupo fué organizado y era dirigido por un jóven abogado llamado Fidel Castro Ruz. Sin querer, todos los que vivíamos en Cuba y teníamos conocimiento de la manera en que Batista llegó al poder y de los abusos que se cometían tanto en el campo de las finanzas, (era de conocimiento público el robo y despilfarro de las divisas que nos habían puesto a la par con el dólar americano) así como el funcionamiento del aparato represivo que fué instituído para detener el insurgente movimiento revolucionario, se veían envueltos directa ó indirectamente en el proceso político del país.

Mi colaboración con el movimiento revolucionario se desarrolló en el campo de recaudación de fondos para la compra de armas, alimentos y ropas para las tropas que se habían alzado en la parte oriental de la Isla, por medio de venta de bonos así como reclutar más personas que brindaran apoyo a las fuerzas revolucionarias y repudiar al Gobierno militar en el poder por la fuerza. No sé como, ni puedo explicar el porque, sin saberlo, me fuí convirtiendo en un lider en mi base de trabajo, sin quererlo y sin hacer nada excepto ofrecer mi amistad a todos los compañeros y tratar de mantener la unidad de todos los cubanos para el beneficio de nuestra Patria, y poco a poco hasta la propia gerencia del Banco comenzó a verme como la figura que ellos pensaron sería capaz de mantener la armonía entre los empleados y oficiales de la institución puesto que todos conocían de mi sentimientos anti-comunistas y mis ideales verdaderamente pro-cubanos.
 
Es bajo este clima de inseguridades y nerviosismo que llega el día primero de Enero de 1959 y la Isla despierta a las noticias que Batista y su gente han abandonado la Isla el 31 de Diciembre 1958 y en unión del dinero malversado se marcharon a otras tierras y dejan el camino abierto para que las fuerzas de Castro logren apoderarse del control político de la Nación... Es un día que nunca olvidaré... regresando a ese momento, recuerdo tener exactamente 21 años de edad, ya estoy casado y hace escasamente 2 meses nació mi primer hijo Gilbertico... En aquel momento pensé que este era el momento más grandioso en la historia de nuestra República... menos de 12 meses más tarde entendí que aquel fué el día más triste y funesto que Cuba ha vivido y posiblemente esto nunca cambiará... ahora les diré como llegué a esta conclusión:

'Una vez que las fuerzas revolucionarias bajaron de las montañas de la Sierra Maestra e iniciaron su marcha desde Oriente en dirección a La Habana, comenzaron los movimientos políticos.
Lógicamente, yo poseía un desconocimiento total sobre estas acciones debido a mis cortos años y de no haber estado  nunca envuelto en actividades políticas. Era el momento de colocar aquellos que ellos consideraban "leales" ó "manejables" en posiciones claves, no solo en puestos gubernamentales pero en todos y cada uno de los centros de trabajo a través de todo el país. Aquí viene mi primer 'alerta' sobre la forma en que operaban estos llamados revolucionarios.
En el Banco donde yo trabajaba también laboraba un lider sindical el cual estuvo exiliado durante el Gobierno Batistiano en Venezuela. Este compañero de trabajo fué miembro activo de la JOC (Juventud Obrera Católica) y representaba los intereses de la Iglesia. Con el triunfo de la Revolución este jóven fué nombrado Secretario de Relaciones Exteriores del Gobierno Revolucionario, una fígura con un puesto de gran importancia en el nuevo Gobierno, sin embargo, en su propio centro laboral ellos manipularon para que el nuevo dirigente sindical del mismo fuese un cuarteto de jóvenes del cual yo era uno de los integrantes... ¿Por qué?... El mensaje que yo recibí era que este otro jóven, dirigente sindical católico iba a interferir con aquello que Fidel, Guevara y Raúl ya tenían en mente, la implementación de un régimen extremista de
izquierda.  Ellos pensaron que los cuatro jóvenes serían manipulados por ellos para servir sus própositos e intenciones'.  Y estuvieron acertados en un 50%. Dos de los cuatro aún están en Cuba y los otros dos no nos prestamos a ser objeto de sus planes. Hoy, uno vive en Jew Jersey, NY y el otro soy yo. ¿y como me dí cuenta tan pronto de las intenciones de Castro y su camarilla?...
      
Fué relativamente fácil, durante una Asamblea Nacional del Sindicato Bancario en el local del mismo en la Habana Vieja, durante un agitado debate algunos de los miembros de mi centro de trabajo los
cuales sabíamos eran miembros del Partido Comunista Cubano, comenzaron a expresar sus ídeas sobre como se debían llevar a cabo las actividades de nuestro gremio y yo, jóven, sin mucha experiencia y lleno de idealismo y deseos de ver la Revolución establecer una nueva Cuba, salté y en frente a toda la membresía desafié a los miembros del Partido Comunista acusándolos de cobardes durante el tiempo en que las fuerzas armadas revolucionarios combatían en las montañas y ellos se negaban rotundamente a cooperar con el movimiento que yo representaba de forma idealistica ó económica... ¿qué les daba el derecho a opinar ni intervenir cuando nunca cooperaron con el proceso revolucionario?...

Para suerte mía, y esto tiene que haber sido con la intervención divina de Dios, el dirigente Nacional de la
Federación Bancaria y una de las figuras más respetadas en los centros bancarios en Cuba, viendo el fuego
y la pasión que se había apoderado de mí, me llamó a un lado y me dijo... Mira Gilberto, tú eres muy jóven
y no comprendes lo que está sucediendo en el piso, pero todo eso que acontece está dirijido y ordenado por el propio Fidel y te estás exponiéndo a ser eliminado... no del sindicato sino de este mundo...


Al buen entendedor con pocas palabras basta... desde ese momento mis esfuerzos fueron dirigidos a la
eliminación del Des-Gobierno Castrista... y este hombre a quien yo creo debo mi vida estaba correcto...
Me sacaron de la Oficina Central del Banco donde yo tenía muchos amigos y gran cantidad de control y me pusieron en una de las Sucursales más alejadas de La Habana y comenzó la persecución, el encarcelamiento y el hacerme la vida imposible... hasta que pude salir de mi querida Patria y ya voy a cumplir 50 años fuera,
pero mi corazón continúa allá y lo estará hasta el dia que muera....

Si pueden entender lo que les he relatado anteriormente, podrán darse cuenta cual es la razón por la que escribo... cuando tenía  19 años de edad fuí utilizado por un grupo de mi propia gente que me engañó no solo a mí, pero a todo un país y a una gran parte del mundo, explotando mis ideales y deseos de ver un futuro mejor para mi Isla y mi gente... y hoy en América, mi segunda Patria, la que me abrió sus brazos y me acogió tanto a mí como a mis padres, mi esposa y mis hijos un grupo similar a aquel, con distintos nombres en vez de Fidel Castro (Barack Obama), en vez de Ché Guevara (Nancy Pelosi), y en lugar de Raul Castro (Harry Reid), están haciéndo exactamente lo mismo en los Estados Unidos, y me duele y frustra no poder hacer más para evitar y detener esta carrera desenfrenada rumbo a la desintegración de las instituciones demócraticas que han hecho de este gran país, un ejemplo a los derechos y libertades en el mundo.


Considero mi deber y mi obligación tratar, al alcance de mis habilidades, de hacer llegar un mensaje de alerta a todos los ciudadanos de los Estados Unidos, no importa de donde procedan, para evitar que las mentiras que hundieron a mi pequeña Isla no sean permitidas en este país, el más grande, generoso y demócrata del Planeta Tierra... No permitámos que esta 'manada' de sirvientes a sistemas de gobiernos que distan de lo que ha hecho de Estados Unidos la Patria de todos los que la queremos, triunfen...


Si solamente una persona lee mis Artículos y reacciona en contra de lo que este grupo de liberales, socialistas e izquierdistas está tratando de perpetuar en contra de los Estados Unidos, las horas que dedico a la semana a tratar de informar con la verdad, están más que justificadas.


Que Dios nos proteja y nos dé las fuerzas necesarias para librar esta batalla hasta que alcancemos el triunfo y podamos eliminar del Congreso, la Casa de Representantes y la propia Casa Blanca a los traidores y cínicos que sin escrúpulos están tratando de vender nuestra Patria y modo de vida a intereses foráneos.


GOD BLESS AMERICA!