¡Aclaro! Me he equivocado al poner el título a este artículo, en su lugar usé uno de otro ensayo, pero que, viéndolo bien, el que por “error” le puse a este escrito le va como anillo al dedo, y el título original de este artículo, también le va al otro texto. Así que dejé las cosas “fuera de lugar”.
He oído decir que si uno pregunta a todos los presos en el penal si son culpables, un 90% de los entrevistados dirán que son inocentes. Claro está que, debido a que están presos, entendemos que su punto de vista no fue eje central para decidir si se les juzgaba o no, me parece a mí que las evidencias y los testigos fueron los factores determinantes que hicieron que sobre ellos se dictara sentencia, Mejor Dicho, la opinión del imputado, no contó para nada.
Bueno, en esta semana “se citó” al expresidente Solís, para que viniera a ilustrar al país entero si él era culpable de manipular información pública sobre fondos del estado.
Coinciden los conocedores que el ex presi: “dio una lección de pitorreo”. Y no es para menos, ya que el sistema que se usa para fiscalizar a los que ejercen puestos públicos sufre no solamente de anemia, está en coma. Ojalá que los viáticos de su “visitica” no haya sido financiada con fondos del “estado tico”. (o sea del pueblo costarricense), porque eso sí que sería, como dicen los gringos: el “cherry on top”.
O sea, a “Luisgui” no solamente los expedientes perdidos lo salvan, también la “idiotacracia” de la “demagogiacracia” tica; y lo anterior no son faltas a la grámatica, (hablando de modernidad) simplemente son nuevas palabras que compaginan (de perlas diría yo) con el lenguaje de desarrollo propio del “discurso” (de moda ya hasta en USA) de nuestro ex, más conocido en el ambiente político como el “PACquetero Solís.” Digo, pues o es un paquetero, o el actual presidente Alvarado se ha tirado en 100 días todo el desarrollo de que se jacta en el Discurso de rendición de cuentas míster Solís el pasado 2 de mayo del 2018 (adjunto el video de canal 13) En él, (discurso) se da fe de que, venciendo grandes opositores, incluida la prensa tica, Luigi ha logrado romper el molde del conformismo antiguo, y ha transformado a Costa Rica en una emergente economía pujante, que le otorga el “honor” de pertenecer a círculos mucho más altos. Mejor dicho, este expresidente arregló a Costa Rica, palabras más, palabras menos, (todas dichas por el claro está).
La pregunta del siglo es: ¿En qué cabeza cabe traerlo a Costa Rica, solo para pedirle la opinión de su gestión, cuando ya en su discurso de despedida, él había dejado muy claro que ese iba a ser el único discurso en que “daría cuentas de su gestión al pueblo tico”? Obcecados los que no entienden su discurso.
Yo de niño iba al circo, y me encantaba, entonces, me gustaban más los animales que los payasos, pero en realidad, lo que me cautivaba eran los acróbatas, quienes, arriesgando su pellejo, hacían valer el precio que se pagaba a la entrada.
Pero en el circo de la política actual, me siento ofendido con los payasos, que se mofan tratándome como a un animal, ojalá algún acróbata nos haga valer la platilla que los costarricenses “invertimos” a la fuerza.
