No sorprende bajo ningún concepto la desigualdad entre Ricos y pobres que en estas últimas décadas se ha desatado con verdadera herejía (empleando un término que raya con lo religioso). Es absolutamente evidente y plenamente comprobado que hoy en día miles de personas poseen cuentas bancarias propias y al más puro estilo de los grandes jeques petroleros.Sin ir muy lejos, en Estados Unidos más de