Con motivo de la época navideña, decidí embarcarme en un viaje para conocer las costumbres de sectores pocos conocidos. Esta vez el Lugar elegido fue la Isla Santay la cual se puede apreciar desde la ciudad de Guayaquil, pero a la que pocas personas han llegado a conocer.

Con nuestro guía y conductor Don Pancho recorrimos casi por quince minutos las aguas del gran Guayas, bordeando la Isla, buscando alguna casa o indicio de donde se encontraba la gente del lugar.

Recorrimos el lugar sin encontrar a ninguna persona por el sector, pero luego de unos minutos fuimos sorprendidos por Tomas Domínguez líder de la Comuna Quien encantado nos dio una entrevista, en la cual nos relató un poco sobre el significado que tiene para ellos la Navidad.

Para las 59 familias que habitan en la Isla Santay, la época navideña se ha convertido en una de las fechas mas importantes del año; ya que es durante el mes de diciembre que estas familias de Escasos Recursos reciben la mayor cantidad de visitas de instituciones y fundaciones, las cuales les brindan el primordial apoyo para resolver las principales falencias que presenta la comunidad.

Así lo afirmó Tomas Domínguez jefe de la comuna, quien nos contó que gracias a instituciones como Galilea y Copol, la Isla cuenta por primera vez, hace ya casi seis meses con una escuelita en la cual los niños del lugar habían decorado su propio arbolito.

“Al parecer son en estas festividades cuando las personas se dan cuenta de que existimos, que somos una población de escasos recursos, que vivimos de la pesca, que tenemos dificultades y que necesitamos de gran cantidad de ayuda, ya que no tenemos los recursos necesarios para mejorar nuestra comunidad”, recalcó Domínguez.

Luego de un recorrido casi improvisado del lugar, Don Tomas muy amigable me invito a subir a su canoa para llevarme al lugar en donde estaba reunida la Comuna. Al llegar, una embriagante música popular nos recibía.

Las personas del lugar estaban reunidos en una celebración navideña organizada por la fundación Galilea, la cual de manera improvisada se encargo de dar un toque de felicidad a grandes y pequeños, otorgando obsequios navideños, que a mas de uno provoco una sonrisa en sus rostro.