María de la Orden, diseñadora, empresaria y una de las influencer más elegantes de nuestro país, ha dado el “sí, quiero” a su marido con tres looks de novia para el recuerdo
María de la Orden y Edward Bouyges se han casado este pasado fin de semana. Una boda que se ha celebrado en Burdeos después de que el viernes pasado lo hicieran en una ceremonia civil en París. Para los enlaces, la diseñadora madrileña afincada en París, ha escogido varios diseños de novia que nos han dejado sin palabras. Y es que la celebración se ha alargado durante dos fines de semana y ha reunido a la élite empresarial y la jet set española y francesa.
Como hemos dicho, María de la Orden ha lucido tres vestidos de novia durante su bodorrio.
Los tres looks nupciales de María de la Orden
La boda civil se celebró el pasado viernes 13 de mayo en París. Una ceremonia de lo más intima que se llevó a cabo en el ayuntamiento y donde los novios llegaron en un minicoche antiguo y rojo. Para este día, María llevo un vestido que os recuerda mucho a los años 50. Un diseño en crepé de seda blanco, de corte midi y manga larga. El gran complemento que destacó fue un tocado firmado por Mimoki, un diseño parisino con red que nos encanta.
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María no ha dudado ni un momento en compartir sus estilismos con todos sus seguidores.
Una semana después de esta boda civil, familiares y amigos viajaron hasta Burdeos para asistir a los dos días de fiesta que organizó la pareja. La familia del novio, los Bouygues, poseen desde hace varios años la bodega Château Montrose, con más de dos siglos de historia. En ese escenario, el 20 de mayo, se organizó una fiesta preboda. Los novios organizaron una “Fería de Abril” en la que no faltó de nada. El dress-code no podía ser otro y la novia lució perfecta para la ocasión. María se decantó por un vestido de novia de inspiración flamenca diseñado por IQ Collection, la firma de Inés Domecq y Virginia del Pozo.
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Vestido largo, repleto de volantes, espalda descubierta y en coche de caballos. ¿Algo más andaluz?
Por último, el sábado por la tarde llevó el vestido más clásico. LA novia entró a la iglesia con un diseño de Jan Taminiau. El holandés es uno de los diseñadores de cabecera de Máxima de Holanda y de Sofía Palazuelo.
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Vestido de novia clásico con escote barco con detalles que se repetían también en los puños de las mangas. Melena recogida en un moño sencillo con tocado en forma de casco del que colgaba un sutil velo de tul.
Tres diseños muy diferentes que reflejan totalmente la personalidad y el estilo de la novia. ¿Cuál es tu favorito?
