¿Queréis plasmar en vuestro gran día vuestra pasión por recorrer el mundo? ¿Qué mejor manera de hacerlo que a través de una boda temática viajera? Vuestros invitados podrán sentir que se trasladan a otra ciudad sin moverse del sitio. 

Seguro que muchas de vosotras y de vuestras parejas os sentís identificadas con esta sensación. Recorrer el mundo buscando descubrir nuevos lugares es uno de los mayores anhelos del ser humano, y llega a convertirse casi en una necesidad para muchos de nuestros novios.

Boda temática viajera: las claves para acertar con cada detalle

Viajar de un lugar a otro no sólo te enriquece como persona por toda la cultura aprendida, sino que refuerza vuestra convivencia como pareja. Por ello, quizás celebrar una boda viajera sea vuestro nuevo propósito para el año nuevo. Si es así, ¡prestad mucha atención y tomad nota para tener una boda ideal a vuestro gusto y antojo!

Una boda viajera desde el principio

Si queréis contagiar con la misma ilusión que tenéis a todos y cada uno de vuestros invitados, nada mejor que empezar con unas bonitas invitaciones viajeras que transmitan vuestra pasión por viajar. Para darle un toque vintage, si es que queréis que vuestra boda temática viajera sea un tanto nostálgica, nada mejor que utilizar imágenes del mapamundi, tonos sepia y letras caligráficas para que todo vaya un poco en consonancia. Si, por el contrario, queréis unas invitaciones a «todo color», la gama de tonalidades está a vuestro favor, ya que podéis emplear aquellos colores que más se puedan ver en los destinos elegidos. Por ejemplo, azules para la costa, verdes para la montaña, amarillos para el desierto…

Otra idea súper chula para una boda temática viajera sería que vuestro seating plan se correspondiera con cada uno de los destinos que más os hayan marcado, y que cada mesa sea una ciudad visitada o incluso un restaurante típico o un monumento de dicha ciudad, buscando siempre la originalidad que más se ajuste a vuestro estilo.

¿Y si vuestro seating plan se convierte en un aeropuerto? Si la finca en la que vais a celebrar la boda dispone de televisores o pantallas de ordenador, podéis pedirlas prestadas y organizar una hoja de ruta. ¡Los invitados pensarás que están en Madrid-Barajas!

Utilizar todos los recursos ya disponibles

A todos nos suele gustar que nos saquen fotos en aquellos lugares a los que viajamos, para guardar el recuerdo de haber estado allí. ¿Qué mejor manera de utilizar esas instantáneas que en vuestro gran día? Si tenéis tantas fotos como lugares habéis visitado juntos, podéis lucirlas en cada una de las mesas de vuestros invitados. La ciudad en la que aparecéis en la mesa será el nombre de la misma.

Otra idea muy original es poner a prueba la cultura de vuestros invitados. ¿Que tal si el seating plan consiste en un conjunto de adivinanzas? Cada uno de tus asistentes tendrá que encontrar cuál es la capital del país que le indicáis. El nombre será el lugar que ocupe durante el banquete.

Además, si queréis crear elementos decorativos de vuestra boda vosotros mismos, eligiendo la boda temática viajera es mucho más sencillo. Por ejemplo, podéis pensar en un photocall temática viajera construyendo un avión en el que tus invitados aparezcan en las fotografías como los pilotos o cualquier otro medio de transporte. También, podéis simular cualquier playa paradisiaca. Si elegís esta última opción, os aconsejamos que incluyáis disfraces cerca del photocall para ambientar más.

Una boda para sentir todas las culturas

¿Te imaginas cada rincón de tu boda ambientado en diferentes ciudades? Esta puede ser sin duda una idea genial para que vuestros invitados conozcan un poquito más de vuestra historia, y les hagáis partícipes de los sitios que habéis visitado.

Preparar pequeños corners gourmet con la comida típica de cada lugar puede ser una de las mejores ideas. Esto os da la posibilidad de incluir diferentes y muy diversas comidas en vuestro menú cóctel. ¡Esto sí! Cuidado con las más extremas como la mejicana o la comida japonesa, ya que no suelen ser tan aceptadas por todos los públicos.

Por supuesto, en este punto también incluímos  solicitar una tarta personalizada con la temática de boda viajera, desbordando originalidad por todos los costados.

Cada sitio posee una melodía que le caracteriza. Si os decantáis por representar solo un país o ciudad, no os olvidéis de incluir en vuestra lista de música una canción de ese sitio. Aunque, por supuesto, lo ideal sería que contratárais a una banda especializada como, por ejemplo, un grupo de mariachis. Por supuesto, esto no está al alcance de todos por lo que también podéis consultar con vuestra banda si pueden tocar algún tema en especial.

En cuanto a los regalos para los invitados de una boda temática viajera, no es nada complicado: tan solo debéis seguir la misma línea que hasta ahora. En primer lugar, pensar en el sitio o los sitios que habéis elegido. Si queréis que todo sea mucho más personalizado, podéis dar diferentes obsequios a vuestros invitados en función del país que le haya tocado en la mesa: Francia, una cajita de croissants, Italia, mini pizzas… Y, si queréis que sea más genérico, decantaros por alguna especia que sea típica del país.

Existen infinitas ideas y formas de personalizar y organizar una boda viajera, tan sólo tenéis que definir el estilo que queréis que tenga vuestro enlace, si la queréis moderna, vintage, con aire nostálgico, más interactiva, etc, y a partir de ahí, dejad volar vuestra imaginación hasta donde os quiera llevar.

Vuestros invitados se lo pasarán fenomenal, y vosotros disfrutaréis y recordaréis de nuevos grandes momentos y experiencias ya vividas, pero ya como… ¡marido y mujer!