�La luz no solo es la base de la fotograf�a, sino que tambi�n es una parte fundamental para que las im�genes que realizamos funcionen. Una buena iluminaci�n hace que tengamos hecho al menos el 25% del trabajo que ya es decir. Vamos a comenzar repasando unos conceptos b�sicos. � Luz directa es aquella que ilumina sin intermediarios aquello que estamos fotografiando. La luz reflejada es aquella que rebota en otro objeto antes de incidir. En ambos casos la fuente puede ser artificial o natural, es decir, puede provenir de un elemento tipo flash-foco o de la luz solar. ��Qu� tipo de iluminaci�n es m�s adecuada para cada situaci�n? �C�mo podemos elegir? Vamos a explicaros que caracter�sticas impl�citas en significado entra�an cada tipo de iluminaci�n. �La luz directa, que proviene de un flash o luz continua, tiende a aplanar superficies y resalta los colores haci�ndolos m�s vibrantes. Es una luz adecuada por tanto si buscamos resaltarlos. Funciona muy bien para fotografiar por ejemplo, edificios, aunque es menos recomendable, para cosas como los retratos ya que este tipo de luz puede incomodar a la persona fotografiada.   A nivel semi�tico, la luz directa evoca modernidad y dureza. Nos permite un enfoque y una definici�n �ptimas, resaltando as� mismo todas las imperfecciones que encontremos en el objeto fotografiado, por lo que hay que tener esto en cuenta para su posible arreglo en postproducci�n. �En esta luz tambi�n, predominan las sombras y los altos contrastes. El tama�o de la fuente emisora y la cercan�a a la que se encuentren determinaran la dureza de la iluminaci�n. �La luz reflejada suaviza las formas, destaca las texturas y les da volumen. Tambi�n apaga los colores desaturando sus tonalidades naturales. Dependiendo del objeto donde est� reflejada puede crear aberraciones crom�ticas, por ejemplo, no es lo mismo que la luz est� rebotada en una cartulina blanca o en una dorada, la luz resultante ser� diferente. El contraste es bajo, las sombras son diluidas debido a que la luz se reparte por toda la superficie. �Debemos tener en cuenta la temperatura del color cuando trabajemos con la luz, tanto si es natural como artificial. El momento del d�a determinar� el tipo de luz y color que obtendremos y debemos recordar siempre que el amanecer predomina la luz fr�a y al atardecer los colores c�lidos. �Hasta pronto