La causa de la muerte de Caleb Schwab la dieron a conocer las autoridades de Kansas.

Caleb Schwab, el niño de 10 años que murió en la atracción Verrückt Water Slide de 168 pies de altura, “murió debido a una gran lesión en el cuello”, según informaron las autoridades forenses de Kansas.

Según publica la revista People, Caleb fue encontrado muerto en el fondo de la piscina, al final del tobogán por el que se deslizó y la policía confirmó que había sido decapitado.

Se dice que el niño iba en compañía de dos mujeres, quienes sufrieron heridas en el rostro pero el que sufrió las peores consecuencias fue Schwab.

Esteban Castañeda, testigo que se encontraba en lugar, dijo a ABC News que su hijo de 14 años y él habían bajado por el tobogán antes el mismo día y que cuando llegaban al final de la atracción su cinturón de velcro se había desabrochado.

Después de la tragedia, cientos de personas comenzaron a donar dinero para los servicios del niño que ascienden aproximadamente a poco más de 30 mil dólares.

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