Llegamos a primer hora de la mañana al aeropuerto de Kuala Lumpur, Malasia, procedentes de la Isla de Bali, Indonesia, donde habíamos pasado las últimas semanas.

Mapa turístico de Kuala Lumpur.

Una vez allí, desayunamos en el aeropuerto, ya que era muy pronto, y nada más terminas cogimos un Grab (el Uber del sudeste asiático) para que nos llevara al Templo Thean Hou en Kuala Lumpur, a unos 45 minutos en coche y algo menos de 20€, pero con la condición de, esperarnos allí unos 45 minutos para que visitáramos el templo (con las maletas en el coche) y luego llevarnos a nuestro alojamiento en la ciudad, pagándole este última trayecto a parte, para así darle propina y que la aplicación no "pillara tajada"...lógicamente aceptó.

Templo Thean Hou o Templo de las Luces.

El Templo Thean Hou o Templo de las Luces es uno de los templos chinos más grandes del sudeste asiático y uno de los más impresionantes de toda Malasia, un templo de 6 niveles dedicado a la diosa del mar china Mazuque, que, en nuestro primer viaje a Kuala Lumpur, no visitamos.

El templo chino es precioso.

Y está repleto de estatuas y decoración.

Todavía no se cómo se nos pudo escapar porque nos pareció un templo realmente espectacular e imprescindible, con una mezcla de elementos budistas, taoístas y confucionistas.

El patio principal de Thean Hou.

Los farolillos del templo son preciosos.

Su intenso colorido rojizo y los cientos de farolillos que cuelgan de los tejados hacen del santuario un paraíso para amantes de la fotografía y usuarios de Instagram, un lugar fantástico para visitar y disfrutar, ideal para empezar la visita a Kuala Lumpur desde aquí, más teniendo en cuenta que está lejos del centro, en el Sur, más cerca del aeropuerto que otros puntos turísticos.

El Templo Thean Hou desde una de las terrazas exteriores.

El Templo Thean Hou está ubicado en lo alto de la colina Robson Hill, donde tiene una extensión de 6.758 m² por lo que desde aquí se obtienen una de las mejores vistas panorámicas de la ciudad.

Los techos también están minuciosamente decorados.

Terminamos enamorados del templo.

El templo es bastante moderno, pues fue construido por los Hainaneses (etnia china que habita en Malasia) en 1987, pero inaugurado en 1989.

La visita a KL no podía haber empezado mejor.

Precioso es Templo de las Luces.

Debéis saber que este bello templo, por su arquitectura y sus laboriosos trabajos de decoración, abre todos los días de 8 de la mañana hasta las 10 de la noche, y además es gratuito.

Los alrededores del templo tienen jardines y estatuas.

Fuera del templo, pero dentro del recinto.

La entrada principal del templo posee una entrada de múltiples arcos con pilares rojos, el color símbolo de la prosperidad y la buena fortuna además de las representaciones de los animales del zodíaco chino.

A los niños también les gustó mucho.

Parte trasera del templo.

Los seis niveles de los que dispone el templo están repartidos de la siguiente forma, en el primero, el más bajo, hay puestos de recuerdos o souvenirs y una cantina donde podéis tomar algo, el segundo nivel alberga la sala polivalente, mientras que las oficinas se encuentran en el tercer nivel. Estos niveles no son interesantes a nivel turístico, a no ser que queráis comprar algún recuerdo o matar el hambre.

Altar central de la Sala de Oración, Tian Hou.

El cuarto nivel, el más interesante para los visitantes y peregrinos, tiene tres alturas o niveles y la sala de oración se encuentra aquí.

Shui Wei Sheng Niang, Diosa de la Misericordia.

La Sala de Oración del templo es el lugar más sagrado, cuyo interior alberga tres altares, cada uno con una escultura de una deidad o diosa, el altar de la derecha está dedicado a Guan Yin, la Diosa de la Misericordia, en el centro tenéis a Tian Hou, mientras que la diosa de la costa, Shui Wei Sheng Niang, está a la izquierda. En el centro de la sala, entre los altares, hay dos pares de oráculos de Kau Cim que pueden ser utilizados por los visitantes.

La piscina infinita en la planta 48 del Expressionz at KLCC.

Unos 20 minutos más tarde, lo que costó llegar en coche, estábamos en nuestro alojamiento en la ciudad, el Expressionz at KLCC, que podéis reservar desde Booking, desde AirBnb o mediante el enlace a la web oficial y, aunque se trata del mismo edificio, dependiendo de dónde lo reservéis, tendréis unas habitaciones u otras, es decir, que unas plantas y habitaciones son de una plataforma y otras de otras diferentes, pero la dirección y el edificio es el mismo.

Pagamos 85€ por dos noches en un apartamento (estudio más bien) de 4 personas (Joel durmió en el sofá perfectamente), con aire acondicionado y baño, y aunque teníamos cocina, no la usamos, aunque sí la nevera y la lavadora. No nos hizo falta nada más.

La piscina de la planta 8.

Después de recoger las llaves (en el mostrador de recepción no, a la derecha del mismo, al fondo están las oficinas de alquiler de habitaciones) y dejar el equipaje, nos pusimos el bañador y subimos a la planta 48 para darnos un chapuzón en la piscina infinita con unas vistas de escándalo.

Pedazo de vistas.

Tenéis que tener en cuenta que para acceder a ella deberéis dejar una fianza que luego os devolverán, y las llaves del apartamento en la planta 8, donde está la otra piscina, a la que sí que podréis acceder libremente. También debéis saber que sólo permiten subir a 20 personas a la vez, pero nosotros, que fuimos dos veces, una de día y otra de noche, sólo tuvimos que esperar 10 minutos para el baño nocturno.

Con el calor que hace se agradece el remojón.

También debéis saber que no está nada bien comunicado, no podréis ir andando a ningún sitio desde ahí, pero el precio de Grab o Gojek para 5 personas es tan económico que no nos importó, de hecho no usamos el transporte público porque nos salía más o menos igual y nos movimos por la ciudad siempre así, en Grab.

Las Torres Petronas de Kuala Lumpur.

A las 18:00 teníamos reservada la entrada para ver las Torres Petronas por dentro, así que a eso de las 17:00 estábamos haciéndonos fotos por los alrededores mientras esperábamos nuestro turno.

Petronas Twin Towers.

Si sabéis que tenéis que venir a la ciudad y queréis visitarlas por dentro, y tener una de las mejores vistas de Kuala Lumpur desde las alturas, debéis reservar y sacar los tickets con bastante antelación o os quedaréis sin vivir esta experiencia.

El símbolo de la ciudad y de Malasia.

Las Torres Petronas o Petronas Twin Towers, símbolo del desarrollo económico de Kuala Lumpur, fueron los edificios más altos del mundo entre 1998 y 2003, superados el 17 de octubre de ese mismo año por el Taipei 101 en Taiwán.

Vistas de Kuala Lumpur desde el Sky Bridge.

Actualmente son las torres gemelas más altas del mundo, miden 452 metros de altura, y atraen a millones de turistas año a año debido a su belleza, de hecho, nosotros hemos vuelto a enamorarnos de ellas en este segundo viaje a la ciudad 15 años después.

KLCC Park desde el Sky Bridge.

Su arquitecto, el argentino César Pelli fallecido en 2019, se basó en el arte islámica para el diseño de esta mega estructura, de hecho la planta inferior de este edificio para los que parece no haber pasado el tiempo tiene un diseño de estrella de ocho puntas que recuerda los arabescos musulmanes. Además cada torre la forman cinco niveles, representando los cinco pilares del Islam.

Los Viajes de Hector en el Sky Bridge.

La gran mayoría de las 88 plantas de las Torres Petronas, de hormigón armado, acero y vidrio, son oficinas y la parte de abajo es un centro comercial, uno de los más lujosos y caros de Kuala Lumpur.

Réplica de los mástiles.

La visita empieza con una pequeña explicación con las normas de seguridad, lo que veremos, dónde y algunos datos prácticos. La visita no es guiada, pero tampoco libre, ya que iréis acompañados, y dura alrededor de 50 minutos.

Kuala Lumpur desde o alto de las torres.

Después subimos hasta el Sky Bridge que se encuentra en la planta 41 a una altura de 170 metros.

Vistas desde 370 metros de altura.

La segunda parada de la visita a las torres Petronas, se realiza en el piso 86, donde las vistas de la de Kuala Lumpur son impresionantes, en especial al atardecer y con la Torre Menara de fondo.

Maquetas de los alrededores.

En nuestra primera visita a las Torres Petronas de hace 15 años, sólo se visitaba el Puente o Sky Bridge, así que esta parte era una novedad para nosotros.

Maqueta de las torres.

Aquí, además de las espectaculares vistas, hay una especie de pequeño museo con maquetas de las torres y otros elementos decorativos de la misma.

Mástil de las torres con la KL Tower al fondo.

Fijaros en el mástil de la torre que se ve desde aquí, idéntico al que está arriba de vosotros, ambos, coronan las torres y miden 63 metros de altura.

Las vistas desde la planta 86.

Otros datos interesantes de las Torres Petronas son que los cimientos de las mismas son los más profundos del mundo, ya que deben soportar alrededor de 270.000 toneladas o que se construyeron en tiempo récord, en alrededor de 6 años, pues en su construcción trabajaban 24 horas al día unas 2.000 personas a turnos con el objetivo de intentar construir una planta cada cuatro días.

Cuando anochece se iluminan.

Una vez abajo continuamos hipnotizados por estos majestuosos edificios y seguimos tomando fotos, eso sí, repeliendo cada 5 minutos a los vendedores de "lupas" para el móvil que hay por aquí.

Espectáculo de luces y sonido...

...en el Symphony Lake.

A las 20:00 hay un espectáculo de luces y música en el KLCC Park, a los pies de las torres, así que nos sentamos en el Symphony Lake, un lago artificial, para disfrutar del show.

Centro Comercial Berjaya Times Square.

Después cogimos un Grab para que nos llevara al centro comercial Berjaya Times Square, que tiene un parque de atracciones cubierto dentro, pero ya casi era hora de cerrar y no salía a cuenta pagar la entrada.

Qué bien se lo pasaron los niños...

Vinimos hasta aquí por tres razones, primero porque en nuestro primer viaje nos alojamos en un hotel frente a este centro comercial, segundo porque las mujeres querían ir de compras, pero también porque buscábamos algo de entretenimiento para los niños, y mirad lo que encontramos.

...tirando unas flechitas.

Después, de nuevo en Grab, volvimos a nuestro alojamiento. Había que cargar las pilas para el día siguiente.