La mañana había empezado muy temprano cuando salíamos de la Isla de Corfú en dirección a Meteora, donde visitamos el Monasterio de San Nicolás de Anapausas primero y el Gran Meteoro y el Monasterio de Varlaam después.

Monasterio de Santa Bárbara o Roussanau.

Roussanau o Santa Bárbara desde las Rocas del Oso.

La cuarta parada del día fue a los pies del Monasterio de Santa Bárbara.

Aquí podéis ver la carretera que une los monasterios.

También conocido como Monasterio Roussanou (Ρουσάνου), esta joya del siglo XVI recibe el nombre del primer ermitaño que se asentó en la roca, y se caracteriza por ser el único de Meteora en el que su comunidad religiosa está formada íntegramente por mujeres (13 monjas y su abadesa) con estrictas ropas negras, aunque el monasterio fue fundado inicialmente por monjes, sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial  y se convirtió en un convento en 1988.

Creemos que es uno de los monasterios con el interior menos interesante.

El acceso es espectacular, pues hay que descender a través de un bosque en miniatura hasta el punto por el que se entra al monasterio si aparcáis arriba, o ascender duramente si, como nosotros, aparcáis a los pies del monasterio. Lo hagáis como lo hagáis es un recorrido bastante exigente, porque primero o después deberéis ascender por la montaña.

Desde Roussanou podéis ver dos monasterios.

Vistyas desde Santa Bárbara o Roussanou.

Es el más pequeñito de todos los monasterios, aunque la falta de espacio se ha solucionado tirando de imaginación y construyendo el conjunto en cuatro niveles distintos.

Monasterio de Varlaam desde Roussanou.

El hecho de que esté habitado exclusivamente por mujeres hace que sea el monasterio en el que más celosamente se guarda la intimidad y la vida contemplativa tradicional por lo que únicamente os dejan visitar la iglesia, y ni siquiera está permitido hacer fotos.

Vistas de Meteora desde Roussanou.

Sus hermosas pinturas murales fueron ejecutadas en 1560, cuando el sacerdote-monje Arsenios era el abad del monasterio.

¿Cuántos monasterios distinguís?...hay cuatro.

Meteora tiene algo mágico.

Justo al lado del aparcamiento hay un camino que lleva directamente a la Rocas del Oso, un lugar excelente para hacer fotos.

Las vistas desde aquí son geniales.

Como veis Meteora es un lugar espectacular.

Merece mucho la pena para aquí porque es uno de los sitios desde donde mejores panorámicas de Meteora conseguiréis.

San Nicolás de Anapausas desde las Rocas del Oso.

Gran meteoro desde las Rocas del oso.

Varlaam desde la Roca del Oso.

Desde las Rocas del Oso se ven 4 monasterios a la vez.

Además, desde aquí podréis fotografiar cuatro de los monasterios a la vez, los cuatro de los que ya he hablado, el Monasterio de San Nicolás de Anapausas, el Gran Meteoro, el Monasterio de Varlaam y el de Roussanou o Santa Bárbara.

Monasterio de Agía Triada.

Vistas desde las Rocas del Oso.

Agía Triada o Santísima Trinidad.

Las Rocas del Oso son también el mejor lugar para admirar o fotografiar el Monasterio de Agía Triada o de la Santísima Trinidad, tal y como podréis ver en las imágenes de arriba.

Monasterio de Agía triada o Santísima Trinidad.

Es el mismo monasterio pero parece otro, ¿no creéis?

Nuestro destino final en Meteora fue el Monasterio de Agía Triada o Monasterio de la Santísima Trinidad (Αγία Τριάδα). Aunque ya había sido Monasterio desde el año 1362, como se indica en un documento por Simeón Uressis Palaeologos, su catolización data de finales del siglo XV, y al menos hay constancia de ambiciosas reformas en 1684, 1689, 1692 y 1741.

Subiendo escaleras toda la mañana.

Los visitantes tienen que seguir un camino que los dirige inicialmente al pie de la roca, antes de empezar a subir unos 140 escalones.

Meteora desde el Monasterio Agía Triada.

Es el más difícil de alcanzar, ya que se alza sobre una roca empinada, por ello la subida también es bastante larga, unos diez o quince minutos, pero una vez que llegue a la parte superior de la vista panorámica de los alrededores es simplemente cautivadora.

Frescos de la Catedral de Agía Triada.

La Catedral principal del monasterio fue construida en el siglo XV y está decorada con frescos en 1741 por dos monjes. Las pinturas murales que sobreviven hoy en día son los trabajos de la hagiógrafos Antonios el cura y su hermano Nicolaos .

Meteora es imprescindible en cualquier viaje a Grecia.

La capilla de Timios Pródromos (San Juan el Precursor), una pequeña iglesia circular con una cúpula, excavado en la roca, decorada por todas partes con pinturas murales de las bellas artes que data de 1682, es de gran interés.

Varlaam desde Agía Triada.

La superficie de este monasterio es bastante grande de modo que hay un gran patio, haciendo las veces de claustro al aire libre.

Kalambaka desde Agía triada.

Al fondo Kalambaka.

En cuanto a las vistas, desde el Monasterio de Agía Triada está la mejor panorámica de los pueblos de alrededor (Kastraki y Kalambaka) como también del resto de Meteora.

Otros monasterios vistos desde este de la Santísima Trinidad.

Parte del monasterio fue utilizado como escenario para las escenas finales de la película de James Bond Sólo para sus ojos.

El Monasterio de San Esteban (Αγίου Στεφάνου), a diferencia del resto, no está sobre una roca, sino directamente en la llanura, de modo que es el monasterio más accesible, donde en lugar de pasos que simplemente cruzar un pequeño puente para llegar a la entrada, aunque nosotros llegamos a medio día, y precisamente cierra en esa franja horaria, de modo que fue el único que no visitamos por dentro.

El Monasterio de San Esteban.

El comienzo de la vida monástica en la roca de Agios Stephanos se remonta a principios del siglo XII. Hosios Antonios, en la primera mitad del siglo XV, y Hosios Philotheos, que renovó o más bien reconstruido desde sus cimientos el viejo monasterio pequeño y elegante, la actual iglesia de Agios Stefanos, en 1545 se mencionan como sus fundadores.

Custro monasterios en un pequeño espaci de terreno.

Naturaleza y arquitectura mezcla ideal de Meteora.

¿Os ha gustado Meteora? ¿Os ha sorprendido? A nosotros muchísimo, pero no hemos sido los primeros. Esta zona ha salido en películas como Solo para sus ojos (duodécima entrega de James Bond) o Tintín y el misterio del Toisón de Oro, además de haber inspirado novelas, videojuegos (algunas localizaciones del primer Tomb Raider, por ejemplo) e incluso discos de música. ¿Creíais que el segundo disco de Linkin Park se llama Meteora por casualidad? En absoluto, fue una manera que tuvo el grupo americano de plasmar el impacto que les había supuesto visitar esta parte de Grecia.

Vistas desde las Rocas del Oso.

Podríamos establecer ciertas similitudes con lo que vimos en algunos templos de Estambul, en Turquía, (especialmente en la Iglesia de San Salvador en Chora). Y es que al final no hay tantas diferencias, pues pensándolo bien son sitios que están relativamente cerca unos de otros.

Esta foto me encanta.

Se pueden visitar seis monasterios en Meteora.

Sereno, espiritual, mágico, místico, extraordinario, impresionante, inmenso, inspirador, impresionante... Estas son sólo algunas de las palabras que podemos usar haciendo un esfuerzo para describir el fenómeno de Meteora una vez visitado...Una naturaleza caótica convertida en un espacio sagrado.

Vistas desde las Rocas del Oso.

Bueno, de momento lo dejo aquí, ya que he terminado de mostraros lo que vimos e hicimos en Meteora, en el siguiente artículo os hablaré de unas ruinas muy especiales, las primeras después de una semana de viaje por Grecia con niños.