La Semana Santa es un evento que se vive con gran fervor en muchos lugares de España. Una época que incluso marca la gastronomía, porque hay algunos platos típicos que se toman en Semana Santa en España. Y en este artículo vamos a señalar los más famosos.

• Torrijas

El dulce más típico de la Semana Santa son las torrijas. Se pueden encontrar en cualquier pastelería o restaurante, pero también se hace este postre en la mayoría de casas españolas.

El origen de las torrijas es incierto, pero ya hay referencias de este dulce en el siglo XV, tal y como indica este artículo sobre la historia de este plato. Lo que está claro es que actualmente la tradición de tomar torrijas en Semana Santa está arraigada por todo el territorio español.

La receta es muy sencilla y tan sólo se necesita pan duro (de uno o dos días), leche, azúcar, canela y huevo. Así, hay que cortar el pan en pequeñas rebanadas. Después se deben empapar las rebanadas de pan en leche con un poco de canela. A continuación, se pasan por huevo batido y se fríen durante muy poco tiempo. Y por último, se echa un poco de azúcar en las dos caras de la torrija. Esta es una receta simple para hacer torrijas, aunque en cada casa se elaboran de una manera diferente y se pueden incluir otros ingredientes como miel, vino o vainilla.

• Pestiños

Los pestiños son otro dulce tradicional de Semana Santa en España, que destacan por su particular forma. Tienen su origen en Andalucía, aunque también se consumen en otras regiones españolas.

La elaboración de este dulce es bastante sencilla, aunque requiere de tiempo y dedicación. Además, al igual que ocurre con las torrijas hay muchas recetas diferentes. Aunque la receta tradicional se elabora con harina, aceite de oliva, azúcar, limón, canela y vino blanco.

El primer paso para elaborar pestiños es infusionar aceite de oliva con un poco de canela y piel de limón. Después, este aceite se mezcla con vino blanco, harina y una pizca de sal para elaborar la masa de los pestiños. La mezcla se debe amasar bien y después cortar en finas tiras. Para dar la típica forma de los pestiños hay que coger una de las esquinas y llevarla al centro, y la otra esquina se debe hacer lo mismo, uniendo así las dos esquinas en el centro. Una vez están todos los pestiños hay que freírlos hasta que cojan color. Y por último se rebozan en azúcar.

• Potaje de vigilia

Un plato que se toma en Semana Santa, pero especialmente en Cuaresma es el plato de vigilia. Y es que según la religión católica no se debe tomar carne los viernes de Cuaresma y el miércoles de Ceniza, aunque algunos creyentes evitan la carne durante todo el periodo. Por este motivo el potaje de vigilia es popular en esta época, ya que no lleva carne y aporta una gran dosis de energía.

Este potaje se elabora con garbanzos, espinacas, bacalao, huevo y caldo de pescado. Así, se debe hacer un sofrito con varias verduras, a elección del cocinero como puede ser tomate, cebolla o pimiento. A este sofrito se añade el caldo de pescado, el bacalao en pequeños trozos (o incluso desmenuzado), las espinacas cortadas y los garbanzos y se deja cocer. Para servir se echa un poco de huevo duro en cada plato.

• Monas de Pascua

Las monas de Pascua son típicas de algunas regiones españolas como Cataluña, Comunitat Valenciana o Murcia. Aunque este dulce se ha extendido a otras zonas.

Las monas de Pascua es un dulce que simboliza que la Cuaresma ya ha acabado y por eso se suele tomar el lunes de Pascua. Además, es tradicional que los padrinos regalen a sus ahijados una mona.

“La mona tradicional es una especie de bizcocho con huevo. Aunque hoy en día se suelen tomar monas de Pascua más elaboradas. Nosotros hacemos de diferentes sabores como limón, chocolate, vainilla o zanahoria. Y las decoramos con diversos elementos como huevos de chocolate, plumas o flores”, explican desde Crudicakes, pastelería vegana y para diabéticos en Les Corts (Barcelona).

• Buñuelos de bacalao

Los buñuelos de bacalao son otra receta típica de esta época del año. Y su consumo en Semana Santa está relacionado con el hecho de que los católicos no comían carne los viernes de Cuaresma.

Esta receta se elabora con bacalao e ingredientes básicos que se pueden encontrar en cualquier cocina como harina, huevo, aceite o ajo. Hay diferentes maneras de elaborar los buñuelos, pero se trata de una receta nada sencilla que lleva tiempo en la cocina. Por lo que lo mejor es seguir una receta al pie de la letra si se quiere preparar este plato típico.

• Arroz con leche

Y el último plato típico que se toma en Semana Santa en España del que vamos a hablar es del arroz con leche. Un postre que se consume durante cualquier época del año, pero especialmente en Semana Santa y Cuaresma.

Este postre se elabora tradicionalmente con arroz, leche, azúcar, piel de limón y un poco de canela. Y su elaboración es muy sencilla. La leche se calienta en una olla o cazo con piel de limón y un poco de canela para que coja el sabor de estos ingredientes. Después se añade el azúcar y cuando rompa a hervir se echa el arroz y se baja el fuego para cocinar todos los ingredientes durante unos 50 minutos. Durante este tipo hay que remover bien para evitar que el arroz se pegue y para que el postre quede lo más cremoso posible. Una vez que el arroz esté blando se sirve en cuencos y se espolvorea un poco de canela.

Estos son algunos de los platos típicos que se consumen en Semana Santa en España. Aunque en función de la región puede haber otras recetas tradicionales como leche frita, tortilla de camarones, hornazo o pava con pelotas.