Aunque probablemente estemos hablando de una de las islas más bonitas de Italia, no todo el mundo conoce este rincón de ensueño que se halla en el medio del Lago Maggiore. En nuestra opinión la Isla Bella es un imprescindible que ver en el norte de Italia, y con este artículo nos proponemos contarte que se puede visitar y como organizar un viaje a la más bonita de las Islas Borromeas.

Os prometemos que vais literalmente a flipar con las imágenes de este lugar tan idílico, ¡y probablemente os crearemos la necesidad de admirar tanta belleza con vuestros propios ojos lo antes posible! ¿Estáis listos para descubrir Isla Bella con nosotros?

Como llegar a la Isla Bella en el Lago Mayor

Si estás pensando en visitar Isla Bella, lo primero que tienes que saber es como alcanzar esta pequeña joya de Italia. Este hermoso islote se encuentra en el Lago Maggiore, uno de los principales lagos italianos, que se ubica en Piamonte. Esta región, cuya capital es Turín, es una de las más importantes del norte de Italia.

Para llegar en avión, los aeropuertos más cercanos donde puedes buscar vuelos son Turín, Milán y Bérgamo. Una vez que aterrices en Italia, tendrás que moverte hacia Stresa, uno de los pueblos más importantes de Piamonte a nivel turístico. Desde esta localidad salen los barcos que cada día alcanzan las Islas Borromeas, incluida la Isla Bella.

Tienes TODOS los detalles, precios y recorridos en el siguiente artículo dedicado: como llegar a las Islas Borromeas.

Si perder tiempo en las colas no es lo tuyo, te sugerimos adquirir previamente este billete online, con el que saltarás las colas que se forman en las billeterías.

Si viajas desde Milán, también te podría interesar una excursión de un día a las Islas Borromeas desde la capital de Lombardia.

Donde dormir en la Isla Bella

Este islote en el lago es tan pequeñito que posee un solo hotel en su territorio, el Boutique Hotel Elvezia, Si quieres ver como es, pincha en este enlace.

Si te gustaría vivir la experiencia de alojarte en una de las Islas Borromeas, también podrías echar un ojo al Hotel Belvedere, que se encuentra en la Isla de los Pescadores.

Si no vas a elegir ninguno de los dos hoteles presentes en los islotes, la localidad más cómoda para hospedarse es Stresa. Empieza a buscar pronto un alojamiento en este link, ¡porque suelen volar!

Otras localidades que se asoman al Lago Maggiore y que podrían ser una buena base para visitar la Isla Bella son por ejemplo Verbania y Baveno. 

Un breve resumen de la historia de la Isla Bella

Hasta el principio del siglo XVII, Isla Bella era un simple islote como hay muchos por los lagos de Italia. En él, vivía una pequeña comunidad de pescadores. La historia de la isla cambia para siempre cuando el conde de una familia poderosa, los Borromeo, adquirió el pequeño islote con la intención de construir en él un palacio.

Carlos II Borromeo decidió también cambiar el nombre de Isla Inferior a Isla Isabella, en honor a su querida mujer. Con el pasar de los siglos el nombre se modificó de Isabella a simplemente «Bella«. Después de haber visitado este lugar, podemos afirmar que este nombre le pega mucho 😃.

Algunos de los mejores arquitectos, escultores y pintores de la época contribuyeron a la realización del Palacio y de sus jardines. Como verás en el siguiente apartado, ¡llevaron a cabo una verdadera obra de arte! Piensa que para acabar el proyecto tardaron nada más y nada menos que 300 años, puesto que las obras terminaron solo en el 1948. Flipante, ¿verdad?

Como última anécdota, te contamos que tanto la Isla Bella, como la cercana Isla Madre, siguen perteneciendo a la familia Borromeo.

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¿Qué se puede visitar en la Isla Bella?

La gran mayoría del territorio de Isla Bella (320 m de largo y 180 de ancho) está ocupado por el majestuoso Palacio Borromeo y sus suntuosos jardines. 

Fuera del monumento se encuentran solo un pequeño paseo por el lago con bonitas vistas, algunas tiendecitas con algunos souvenirs de Italia, el hotel que mencionamos anteriormente y un par de callecitas.

Dicho esto, nuestro consejo es de alcanzar Isla Bella solo si quieres entrar al Palacio Borromeo y los jardines. En caso contrario, no tendrás otras cosas que ver en la isla, y malgastarás el dinero del barco.

Empezamos ahora a hablarte del Palacio Borromeo y de todas las atracciones que se pueden admirar en su interior:

Palacio Borromeo

Una vez que accedas y subas los escalones de la entrada, empezará tu recorrido por los diferentes salones del edificio. El primero que encontrarás es la sugestiva Galería Berthier.

Galería Berthier

El recorrido por el Palacio Borromeo empieza por todo lo alto, con uno de los salones más bonitos de todo el edificio. Esta galería toma el nombre de Louis-Alexandre Berthier, un importante general francés, que durmió en esta sala durante la visita de Napoleón a la Isla Bella.

Lo que llama la atención son el hermoso techo y las paredes, donde se encuentran 130 cuadros con marcos dorados que pertenecen a la familia Borromeo. Las obras de arte son tantas, ¡que literalmente no queda hueco en las paredes! 😁. La colección posee importantes obras de arte originales, como algunas copias de artistas del calibre de Tiziano, Correggio y Raffaello.

La sala del Trono

Como el nombre preanuncia, el protagonista de este salón es sin lugar a dudas el enorme trono de madera dorada, coronado por un llamativo baldaquín y por una tapicería que representa símbolos de la familia Borromeo.

La habitación posee mucha decoración, sobre todo en la paredes, en cuyos ángulos aparecen siete figuras de gigantes masculinos que fingen sostener con sus hombros el peso del techo. ¡Brutal!

La sala de las Alcobas

Al lado de la precedente sala, se pueden admirar dos alcobas, en las que se encuentran dos camas donde en una ocasión descansaron la reina Maria Cristina de Savoia y su marido.

En esta habitación tampoco se han quedado cortos con la decoración, gracias a la presencia de espejos con valiosos marcos y pinturas con motivos floreales de color turquesa y dorado.

La sala delle medaglie

Este era el salón donde se realizaban los banquetes más importantes, cuando personas con mucho prestigio llegaban a visitar los Borromeo en la Isla Bella.

Se llama sala de las medallas por la presencia de diez representaciones redondas (en italiano medaglie) esculpidas en la madera de la parte superior de las paredes, que cuentan algunos episodios de la vida de Carlo Borromeo.

En el medio del salón se halla una mesa de grandes dimensiones, donde está colocado un juego de vajillas de vidrio francés del final del 1800. Encima de la mesa, no podrás dejar de admirar la impresionante lampara realizada en vidrio de Murano.

El salón central

Se trata de la sala más grande y más alta de todo el palacio, que culmina con una hermosa y gigantesca cúpula. En el medio del salón se encuentra un modelo arquitectónico del Palacio Borromeo y de los jardines, realizado por un camarero que trabajaba allí a principio del 1800.

La sala de la música

En esta amplia sala destacan sobre todo dos elementos: el primero es la presencia de algunos instrumentos musicales, como el hermoso piano que te enseñamos en la siguiente foto. Por este motivo, esta habitación se define como la sala de la música.

El otro es la enorme lampara en vidrio de Murano que cuelga desde el techo, justo encima del piano.

La sala de Napoleón

En esta habitación se alojó Napoleón y su mujer una noche durante su visita a las Islas Borromeas. Se cuenta que el general francés llegó a la Isla Bella sin avisar, con 60 personas a cuestas. El personal del palacio tuvo que preparar en muy poco tiempo una habitación digna de dos huéspedes tan importantes y una comida para treinta personas.

Se dice que los trabajadores quedaron alucinados con lo intrusivos y maleducados que fueron el general y su gente, y por lo sucias que dejaron las habitaciones al marcharse. ¡Agradecieron a Dios que se quedaran en la isla solo una noche! 😁

El salón de baile

Realizada en estilo neoclásico, este salón estaba destinado a los bailes organizados con personas muy influyentes de la época. Entre ellos, se quedaron gratamente sorprendidos por la belleza del salón el rey Leopold de Bélgica y Lady Diana, que visitó la Isla Bella con el príncipe Carlos en el 1984.

Las grutas

Llegamos ahora a una de las zonas del palacio que más nos sorprendió, sobre todo por su unicidad. Bajando unas escaleras, se llega a la parte inferior del edificio, donde se encuentran otras seis habitaciones. 

Los artistas que las realizaron querían que las salas se parecieran lo más posible a unas grutas naturales, así que llenaron las paredes de pequeñas piedras, toba, lava, trocitos de carbón y mármol liso. El resultado es alucinante, sobre todo si piensas que con este material se han creado decoraciones de estuco relacionadas con el tema del agua como delfines, peces, sirenas, conchas y ninfeas. ¡Estamos seguros que nunca habrás visto algo así!

Si añadimos además que estas estancias poseen ventanas con hermosas vistas al Lago Maggiore, ¡ya entenderás el porqué nos hemos enamorado de este lugar! 

Los jardines de Palacio Borromeo

Una vez que hayas flipado con las grutas, probablemente te quedarás aún más anonadado delante de la belleza impresionante de los jardines del palacio, indudablemente uno de los más bonitos y cuidados que hemos visto jamás.

En cuanto salgas de las grutas, verás un pequeño vestíbulo con una estatua de Diana. Subiendo las escaleras laterales te encontrarás en el Piano della Canfora, un jardín «alla italiana» de estilo barroco que toma el nombre del enorme árbol de Canfora que se encuentra al principio del prado.

Antiguamente en este lugar habían sobre todo plantas de cítricos y de verduras, que los cocineros usaban para preparar sus recetas. Vamos, ¡lo que viene siendo un KM 0 de nuestra época!

Sucesivamente, en el siglo XIX se plantaron plantas procedentes de diferentes partes del mundo, así que el jardín empezó a tener solo una función estética. Asimismo, se introdujeron animales exóticos como los pavos reales, que aun hoy en día muestran su asombrosa belleza a los visitadores del palacio. ¡Son realmente preciosos! Seguro que te quedarás varios minutos como nosotros para admirarles y hacer alguna fotito.

Teatro Massimo: la atracción más bonita de la Isla Bella

En el medio de estos jardines botánicos tu ojo no podrá no caer en la majestuosa construcción que se encuentra en el medio, denominada Teatro Massimo.

Se trata de un monumento que consta de tres plantas a las cuales se puede acceder por unas escaleras laterales. Imponentes estatuas, fuentes, numerosas conchas de piedra, decoraciones de todo tipo… En pocas palabras, ¡un triunfo de belleza barroca! En la parte superior, en posición central, se halla un unicornio, símbolo de la familia Borromeo.

Después de haberte hecho mil fotos con este monumento tan bonito, sube las escaleras laterales del mismo, y una vez encima, te encontrarás en una terraza rectangular, el punto más alto de toda la isla. Desde aquí, se puede gozar de la mejor vista del Lago Maggiore y de sus alrededores. ¡Es un lugar imprescindible que ver en Isla Bella!

El jardín del amor

Si pensabas haber acabado con la visita de los jardines, ¡te estás equivocando! La Isla Bella nos sorprende con otra imperdible joya: el jardín del amor.

Para acceder a él, baja de la terraza y coge el camino de la izquierda. Allí podrás pasear por un pasadizo repleto de coloridas, perfumadas y hermosísimas rosas, ¡un sueño para cualquier amante de esta flor!

Al final del mismo, te encontrarás con unas escaleras donde se hallan tres estatuas. La central representa el amor, la cual da el nombre al entero jardín.

Caminando hasta al fondo en dirección del lago, notarás como el jardín está constituido por diez terrazas, cada una adornada con obeliscos y estatuas en los lados de derecha e izquierda. Las cuatro más grandes que verás, encima de la estatua del amor, representan las cuatro estaciones.

En el centro del jardín se ubica también una fuente poblada por bonitas ninfeas y cientos de flores de todos los colores que embellecen aún mas este lugar tan idílico, ¡uno de los lugares más icónicos de la Isla Bella!

¿Cómo y donde comprar el billete para ver Isla Bella?

El ticket de entrada se puede comprar tanto en la billetería del palacio, como en la web oficial. En ambos casos el coste es de 20 euros por persona. Nosotros te aconsejamos comprarlo en internet con antelación, de esta manera te asegurarás saltar la cola, puesto que hay un acceso dedicado para los que posean ya el billete reservado. Con esta entrada tienes derecho a visitar tanto el palacio, como los jardines.

Otra sugerencia que podemos hacerte es que adquirieras el billete «Isola Bella + Isola Madre» con el que podrás visitar las dos Islas Borromeas por un precio de 28 euros en vez que 37. Ya que has llegado hasta aquí, es un deber admirar las dos, así que es un billete más conveniente 😃.

Los niños hasta los 6 años entran gratis, mientras que los menores de entre los 6 y 15 años pueden entrar con una tarifa reducida de 11 euros.

¿Cuándo visitar Isla Bella?

El mejor periodo para admirar Isla Bella en su máximo esplendor son las estaciones de primavera y verano, más precisamente de abril a agosto. En estos meses encontrarás la mayoría de flores y plantas florecidas. ¡Verás que espectáculo! Recuerda que de noviembre a la mitad de marzo no es posible acceder a Isla Madre e Isla Bella. Solo es posible alcanzar la Isla de los Pescadores.

Conclusión 

Después de lo que te hemos contado, ya te han entrado unas ganas locas de visitar la Isla Bella en el Lago Maggiore, ¿verdad? No dudes en hacernos preguntas en comentarios para que puedas organizar tu viaje de la mejor manera posible. ¡Nos vemos en otros artículos de Llevameaitalia, donde te descubrimos otros bonitos lugares que ver en Piamonte!