Estos son los mejores consejos para tener una buena salud:

No subas las escaleras, ¡úsalas!

Si tienes escaleras en tu casa u oficina, aprovecha cada oportunidad que tengas. Pero no te detengas ahí. Para un entrenamiento cardiovascular fuerte, sube y baja las escaleras repetidamente. Comienza con un número limitado de repeticiones, luego aumenta a medida que te sientas más fuerte. 

Beber 1 vaso extra de agua

Hay beneficios para la salud al beber más agua: ayuda a mantener la temperatura normal, lubrica y amortigua las articulaciones, protege la médula espinal y otros tejidos sensibles, y elimina los desechos a través de la orina, el sudor y las deposiciones. 

Haz una caminata de 10 minutos

Camina durante la hora del almuerzo o hasta una tienda que esté a una cuadra de distancia para comprar un galón de leche; todo es bueno para ti. Incluso si hace frío afuera, a menudo puedes caminar cómodamente vistiéndote bien: comienza con una capa absorbente de sudor al lado de tu cuerpo, agrega capas aislantes para el calor y cúbrelas con una capa impermeable.

Concéntrate en sentarte derecho

Tener una buena postura puede prevenir dolores y molestias, y también puede reducir el estrés en los ligamentos. Puedes intentar dejar una nota para sentarte derecho, hasta que se convierta en un hábito inconsciente. Caminar con los hombros hacia atrás y la cabeza en alto también puede hacerte sentir bien contigo mismo.

Acuéstate media hora antes

¿Duermes unas siete u ocho horas la mayoría de las noches? Muchos de nosotros no, pero los expertos dicen que esto es un marcador de buena salud cardíaca. El sueño sólido no solo te brinda más energía, sino que también puede ayudarte a alcanzar objetivos de alimentación saludable. Cuando tienes poco sueño, reduce la producción de hormonas de tu cuerpo que suprimen el apetito, y esto puede contribuir al aumento de peso.

Reemplace 1 lata de refresco de dieta con agua carbonatada

Si bebe refrescos de dieta todos los días, usa mejor agua mineral con gas para ayudarte a dejar de consumirlo. La investigación sugiere que el cerebro reacciona a los edulcorantes artificiales al igual que a los dulces azucarados. Ingerirlos con frecuencia puede aumentar tu deseo de alimentos ricos en calorías y ponerte en riesgo de aumentar de peso.

Balancee en una pierna por 10 segundos a la vez, luego cambie a la otra pierna

Este ejercicio simple es algo que puedes hacer mientras te cepillas los dientes o estás parado en una línea. Es parte del entrenamiento neuromotor, que te ayuda a mejorar tu equilibrio, agilidad y movilidad, todo lo que necesitas en el movimiento diario y en otras formas de ejercicio.

Pésate todas las semanas

Para evitar que tu peso se apodere de ti, establece un objetivo de mantenimiento o pérdida semanal para ti, anótalo y compáralo con ese objetivo. Pésate cada semana el mismo día y al mismo tiempo, y usa la misma cantidad de ropa para mantener la consistencia.