Tanto Ford como Tesla están liderando el camino hacia la conducción autónoma con tecnologías de vanguardia. Con los sistemas Ford BlueCruise de Ford y el Autopilot de Tesla, estos fabricantes están transformando la forma en que conducimos. A continuación, examinaremos en detalle ambos sistemas para ofrecerte una comparativa detallada.

Ford BlueCruise es la última incorporación de Ford a la asistencia de conducción avanzada. Este sistema se basa en sensores y tecnología de detección para controlar la posición, la dirección, la aceleración y el frenado del vehículo en su carril. El sistema también incluye una cámara que monitorea la mirada y la posición de la cabeza del conductor para garantizar que su atención permanezca en la carretera. La versión 1.2 de Ford Bluecruise trae varios avances, haciendo hincapié en la mejora de la interacción con el conductor. Entre las mejoras destacadas se incluyen el Asistente de Velocidad Predictivo, el Control de Posición en el Carril y el Asistente de Cambio de Carril. Aunque Ford BlueCruise ha sido muy bien valorado, es importante resaltar que no es un sistema de conducción autónoma completo, sino un sistema de asistencia avanzada a la conducción, principalmente para autopistas.

Por otro lado, el Autopilot de Tesla es actualmente uno de los sistemas de asistencia de conducción autónoma más sofisticados del mercado. Cada Tesla nuevo viene con ocho cámaras externas y un procesamiento de visión potente para proporcionar una capa adicional de seguridad. Autopilot ofrece funciones como el Control de Crucero Adaptativo al Tráfico, el Asistente de Dirección, el Cambio Automático de Carril y el Autoparqueo. Tesla también cuenta con una opción de Autopiloto Mejorado y una Capacidad de Conducción Autónoma Completa. Sin embargo, se debe destacar que estas funciones no hacen el vehículo completamente autónomo y aún requieren supervisión activa del conductor. Otro factor destacado de Tesla Autopilot es su habilidad para navegar en cualquier lugar donde haya marcas de carril, incluso en carreteras curvas.

Por último, es relevante mencionar que tanto Ford como Tesla aún tienen camino por recorrer en cuanto a la monitorización del conductor. Ford BlueCruise utiliza un sistema de seguimiento ocular, pero carece de resistencia al torque en el volante, lo que puede dificultar la intervención oportuna del conductor. Por otro lado, el sistema de Tesla requerirá que el conductor aplique un torque en el volante, lo que puede ser incómodo en viajes largos.

En resumen, ambos sistemas representan avances significativos en la tecnología de conducción autónoma. Sin embargo, la elección entre Ford BlueCruise y Tesla Autopilot dependerá en última instancia de las necesidades específicas del conductor.