L’Espagnol Carlos Alcaraz a battu ce dimanche le Norvégien Casper Ruud en finale de l’US Open et, d’un seul coup, a soulevé le premier titre du Grand Chelem de sa fulgurante carrière et est devenu le plus jeune numéro un du tennis Masculino.

Alcaraz, de 19 años y cuatro meses, venció a Ruud en Nueva York por 6-4, 2-6, 7-6 (7/1) y 6-3 en una final inédita, en la que los dos jugadores pudieron conquistar sus dos primeros gran trofeo y la gestión de la ATP.

El español, que aguantó dos balones de Ruud para ganar el tercer set, es además el primer campeón de Grand Slam desde su compatriota e ídolo Rafael Nadal (Roland Garros, 2005), el gigante al que aspira a triunfar.

Tras ganar el último punto, Alcaraz se desplomó en la pista llorando y corrió a besar la grada junto a su padre, Carlos, y su entrenador, el ex número uno del mundo Juan Carlos Ferrero.

Alcaraz cumplió su doble sueño en una dura final en la que superó el gran nivel de Ruud, subcampeón del último Roland Garros, y el cansancio de dos semanas en las que compitió más tiempo en pista que nadie en un Grand Slam. .

El prodigio del pequeño pueblo de El Palmar (Murcia), con una sonrisa infantil y marcas de acné en el rostro, aguantó la presión en los momentos más difíciles y se coronó un lluvioso 11 de septiembre en Nueva York, en la pista más grande del mundo. tenis.

Tras un breve y emotivo homenaje a las víctimas de los atentados de 2001, Alcaraz fue recibido con una gran ovación por los 23.800 aficionados de Nueva York, que disfrutaron de su ascenso en un torneo repleto de emocionantes triunfos y piezas de museo.

carrera meteórica

Los hitos meteóricos de la carrera de Alcaraz están a la altura de los inicios de los ‘Big 3’ (Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic) y ahora, con su primer gran título a la vista, presenta su firme apuesta por liderar una nueva era. en tenis masculino.

“¡Enhorabuena Carlos Alcaraz por tu primer Grand Slam y por el número 1, que es el colofón a tu primera gran temporada, que seguro que serán muchas más!”. Nadal lo felicitó de inmediato en Twitter.

Desde la creación del ranking ATP en 1973, Alcaraz es el jugador número 28 en llegar a lo más alto y el cuarto español, tras Nadal, Carlos Moyá y Juan Carlos Ferrero, el técnico de la joya.

En un guiño al deporte, Ferrero había sido el último tenista en alcanzar el número uno en el US Open y también lo hizo en 2003, año en que nació su pupilo Alcaraz.

El español superó la marca de precocidad del australiano Lleyton Hewitt, que llegó a la cima en 2001 con 20 años y nueve meses, en una temporada fulgurante en la que ganó más que títulos (5) y partidos (51) que cualquier rival. .

contra las cuerdas

En la sala de espera de un histórico doblete, Alcaraz arrancó el partido con el brazo ligeramente encogido.

Desde la grada, no tardaron en animar a su nuevo protegido, al grito de «¡Vamos Carlos!». (Vamos, Carlos), y el asturiano fue templando los nervios.

Alcaraz, que respiraba desde su primer descanso, intentó introducir velocidad en el juego pero le faltó chispa ante la regularidad del noruego.

El español mantuvo su estrecha ventaja para ganar el primer set, pero en el segundo pareció acosado por el desgaste físico y mental de su carrera en Nueva York.

En sus tres partidos de esta semana estuvo 15 horas y 13 minutos sobre el terreno de juego, frente a los 8:56 de Ruud, para sobrevivir a duelos nocturnos ante Cilic, Tiafoe y Sinner, en los que salvó un punto de partido.

Ruud vio su oportunidad y se llevó el segundo set, mostrando aún más las sutilezas típicas de su rival.

En el tercero, Alcaraz vio como Ruud le adelantaba para adelantarse 4-5, descargando su frustración con un tiro de raqueta a la red.

Por primera vez en el torneo, Alcaraz vio salir victorioso a su rival en los intercambios más brillantes y llenos de acontecimientos, que levantaron una multitud repleta de celebridades.

Con un 4-5 de ventaja, Ruud aprovechó dos puntos de set en un rápido desempate del que Alcaraz salió victorioso con un estratosférico intercambio final que esta vez cayó de su lado.

El noruego llegó al desempate con varios tiros bien desviados que vieron avanzar al español con un cómodo parcial de 7-1.

En el set final, Ruud cedió su servicio en el sexto juego y, tras ser derrotado en junio en París por Nadal, ahora ha cedido ante el nuevo fenómeno español..