“¿Has visto a alguien diligente en su trabajo? Se codeará con reyes, y nunca será un don nadie.” Proverbios 22:29

Nacida en 1928, se convirtió en el mayor atractivo de taquilla de Estados Unidos a la tierna edad de diez años. Sorprendentemente, a millones de fanáticos todavía les encanta ver las actuaciones de su infancia. Las películas parecen tan frescas hoy como entonces, en parte debido a los consejos de una madre le dio a la joven Shirley Temple. Justo antes de que el director gritara "¡Acción!" La mamá de Shirley le susurró al oído a su hija: "¡Brilla, Shirley, brilla!" Era el recordatorio a la pequeña Shirley para que se concentrara y prestara toda su atención a la actuación.

Con la ayuda de Dios, puedes Brillar. Cuando Moisés bajó del monte Sinaí, la luz brilló en su rostro porque había podido encontrarse con el Dios del universo. Cuando te reúnes con Dios, también debería ser evidente para las personas que nos rodean. Entonces, ya sea que estés en el trabajo, en casa, en la escuela o jugando, recuerda hoy, y todos los días, brillar.