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Certificación de obra: Requisitos y plazos en 2023

El sector de la construcción tiene ciertas particularidades a comparación con otros. Las obras son costosas y de larga duración, así que se suelen abonar a medida que se realizan. Para hacerlo según el cauce legal, es necesario emitir una certificación de obra, que protege tanto al constructor como al promotor. 

Independientemente de si eres el responsable de llevar a cabo la obra o el cliente que la solicita, debes entender todo sobre este certificado. Por ello, te vamos a contar más sobre su funcionamiento, explicándote para qué sirve y cómo emitirlo de acuerdo a los cauces legales en 2023.

¿Qué es una certificación de obra?

La certificación de obra es un documento que convierte una parte del presupuesto de construcción en una factura. Es emitida por el contratista para facturar una parte del presupuesto, recibiendo así pagos parciales por la parte finalizada. 

Este sistema se realiza teniendo en cuenta el presupuesto previamente pactado, aunque se pueden añadir variaciones, siempre que estén debidamente justificadas. Eso es porque está sujeto a la aprobación de un responsable técnico. 

¿Para qué se usa una certificación de obra?

La certificación se adapta a las particularidades del sector de la construcción, con obras largas y costosas. Pagar por adelantado es muy arriesgado para el que encarga la obra, pero pagar al final es igualmente peligroso para el constructor, que podría quedarse sin cobrar. Por ello, esto se ofrece como una solución intermedia. 

En este proceso, se van pagando las fases ejecutadas. Esto permite al constructor hacer acopio de materiales y maquinaria y demostrar que las obras se están ejecutando para exigir pagos. Por otro lado, es útil para que el promotor pueda comprobar cómo va el proceso y ver qué fases del mismo han finalizado. 

Cuando se termina el proyecto, se emite la llamada certificación final de obra. En este caso, se firma por el director de obra y de ejecución de obra ante notario, siempre visada por el colegio profesional. Marca la finalización del proyecto, siendo así el más importante. 

Cómo hacer una certificación de obra

La certificación debe estar aprobada y visada por un técnico competente. El número de certificaciones emitidas será el mismo que el número de pagos realizados, algo que se pactará previamente entre promotor y constructor. 

Hecha por la dirección de la obra, debe valorar la facturación de los trabajos, algo que se puede hacer de tres formas:

  • Precio alzado: un precio fijo sin variaciones, sin diferenciar partidas. Todas las certificaciones son de la misma cantidad, equivalente a un porcentaje de la obra. 
  • Por partidas: la certificación tiene precios diferentes que dependen de las partidas ya construidas.
  • Por administración: precios fijados según el presupuesto de mano de obra y materiales. Se pueden añadir trabajos suplementados cuando ha habido que añadir un coste a la partida. 

Para emitirlo, deben aparecer todos los datos. Existen ejemplos de certificaciones de obra en internet, que son modelos que puedes descargar para utilizar. Por norma general, contendrán estos datos:

  • Datos del contratista y cliente: Razón social, NIF/CIF y domicilio fiscal.
  • Datos de la certificación: fecha, periodo, número de serie y referencia. 
  • Información de la obra: adjudicación, presupuesto, plazos, localización y fecha de inicio y final prevista. 
  • Porcentaje del presupuesto final de la acreditación: se incluirá lo acreditado en las anteriores. 
  • Desglose de conceptos y partidas
  • Desviaciones: si se hubieran producido, se incluirán, siempre que estén justificadas. 
  • Importe final

Una vez esté presentada, será revisada por el contratista, el cual deberá aprobarla para continuar. El requisito es que todo esté expuesto de forma clara, con justificación de las desviaciones y explicando cómo se ha desarrollado el proyecto. 

Plazos de certificación de obra

¿Cómo se cobran las certificaciones de obra? Para saberlo, hay que conocer los diferentes plazos a los que está sujeto. Aunque todo esté fijado en las condiciones del contrato que han firmado el constructor y promotor, existen ciertas condiciones establecidas por ley. 

Una de ellas es que el plazo máximo para pagarlas será de 60 días. Si es la administración pública, el plazo bajará hasta los 30 días. El cobro se realizará a partir de la finalización de las fases. 

El número y periodicidad de certificaciones depende de la planificación previa realizada y que se adaptará a las necesidades de cada uno. Realizar muchas tiene la ventaja de una mayor liquidez, pero también requiere de más control documental y de mayor velocidad de elaboración. 

En ocasiones, se podrían producir retrasos, que derivan en falta de liquidez para el constructor. Por ello, es necesario tener un fondo de maniobra o utilizar otras formas de financiación, como préstamos o anticipos de facturas. 

Preguntas frecuentes

Vamos a responder algunas preguntas frecuentes sobre las certificaciones de obra. 

¿Cómo se factura a la administración?

Si trabajas para la administración, funciona de otra manera. Se deben presentar las facturas de forma electrónica con el formato Facturae, estando firmadas electrónicamente. Generalmente, la administración paga antes de 30 días, pero a veces no ocurre. 

¿Cuánto tarda un banco en ingresar una certificación de obra?

Una vez que ha sido enviada, dependerá de la entidad bancaria. En ciertos casos, puede ser instantánea, pero en otros, puede tardar algunos días y retener los pagos, especialmente si es una certificación final, que necesita una firma en notaría. 

Conclusión

Tanto si eres del sector de la construcción como si eres el promotor, ya sabrás de la importancia del certificado de obra. Recuerda llevar el control de todos los certificados emitidos o recibidos, haciendo un seguimiento de la obra y de los pagos, para evitar sanciones o problemas de liquidez. 

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