La peor vergüenza de un latino es el que le avergüence ser latino. Que al ver lo que debiera ser el reflejo de su imagen experimente un rubor tal que lo lleve a querer trasformar el estereotipo que su yo interior le crea pero que, en su mente acomplejada e irresoluta, no corresponde la idealización de lo que él cree ser con lo que realmente es pero no desea ser. Uf hasta yo mismo, que concebí lo escrito, quede turulato con el ramalazo.
Pues bien ahí está el cipotazo que quiero mandar a ese, Esos, o quienes han manifestado que nuestra Sofía Vergara, la muy querida Toty, fue la vergüenza Latina de los premios Grammy. A quienes en su miope mente vergonzante la vieron “encasillada en el personaje de latina ‘bastantona’, ‘ordinaria’, ‘quitamaridos’ y otras cosas más”. A esos latinos incapaces de reconocer, como lo hizo la prensa especializada, que “la actriz de la popular serie Modern Family, se convirtió en la gran protagonista de la actuación”.
La vergüenza son ellos, pues la que subió al escenario de los Grammy 2016 fue una autentica mujer Latina, Caribe por demás, que actuó como ella es, como somos los de su raza, los coincidentes en costumbres e idiosincrasia. Así, sin remilgos, con alegría, desparpajo, sabrosura, ritmo y ese espíritu bullanguero que la latinidad nos otorga y la latinoamericanidad nos acentúa.
Toty es orgullosamente Caribe y Latina, no esconde su manera de ser ni su personalidad abierta, alegre, y descomplicada; no tiene por qué hacerlo. Ella en todos los escenarios en donde se ha presentado, y el de los premios Grammys en donde ya había estado no ha sido la excepción, con su andar flequetero, natural desparpajo, y coqueta picardía, propios del temperamento de las féminas nacidas en el litoral norte del territorio colombiano, ha venido sublimando, y de qué manera, la belleza, donaire, y grandeza, de la mujer Caribe y Latinoamericana.
Los que nos avergüenzan son esos pobres que sienten vergüenza de verse reflejados en lo que son, pero que les apena ser. Al carajo con ellos.
Ricardo Buitrago C.
