Y es que, cuando me Hablan de la Sociedad del Siglo Xxi, algo renace en mi y sin saber realmente por que, indefectiblemente presto toda mi atención, el ritual comienza mientras desplazo la mano para que haga contacto con mis labios, prosigue cuando cierro los ojos unos segundos para distanciarme de lo que hacia hasta ese momento y los abro a la vez que inclino la cabeza, como obligando a mi mente a seguir la exposición/discurso en busca de sus flaquezas, incongruencias o errores.
Cuando en una de esas conversaciones, escucho hablar de la era de Internet y de las nuevas tecnologías, retiro la mano, pero sigo escuchando.
Si de lo que me hablan es Acerca de la sociedad de la información, sonrió.
Si de lo que me hablan es acerca de la sociedad del conocimiento, me descojono.