Este jueves y por primera vez desde que sufrió el intento de magnicidio, Cristian Fernández de Kirchner volverá a encabezar una sesión del Senado de la Nación en medio del clamor militante impulsado incluso desde la Mesa política del Frente de Todos.

La última vez que CFK estuvo al frente de una sesión fue justamente el pasado 1 de septiembre. Aquel mediodía había recibido en su despacho al premio Nobel de la Paz y titular del Servicio Paz y Justicia, Adolfo Pérez Esquivel.

Cuando concluyó la intensa sesión legislativa, se dirigió a su casa y sufrió un intento de asesinato en la puerta del domicilio. El atentado conmocionó al país y al Congreso.

El Senado no frenó su funcionamiento, pero desde entonces las pocas sesiones fueron presididas por la presidenta provisional Claudia Ledesma Abdala de Zamora.

Meses más tarde, la vicepresidenta fue condenada en la armada causa Vialidad a 6 años de prisión e inhabilitación perpetua a ejercer cargos públicos, de facto una proscripción política. En aquel momento, la líder del peronismo anunció que no sería candidata a nada en 2023, justamente por la proscripción en su contra.

Más de cinco meses después de la última sesión del Senado con Cristina, se reunió finalmente la mentada Mesa política del FdT donde se pergeñó una comisión que la visitará para que revea su decisión de no ser candidata este año.

Esta «comisión» se suma así al clamor surgido desde la militancia y la dirigencia peronista que pide por «CFK 2023».

Es en este contexto que la dos veces presidenta volverá a presidir una sesión de la Cámara Alta. La confirmación de la presencia de Cristina Kirchner en la sesión no se conocerá hasta último momento, pero desde la Cámara dejan trascender que la vicepresidenta volverá a ocupar el sillón de conducción del recinto.

Jornada caliente en el Senado

Los senadores llevarán adelante una doble sesión con la actividad preparatoria de designación de autoridades y el tratamiento de dos proyectos incluidos en las sesiones extraordinarias: la Ley Lucio y Alcohol Cero.

Pese a que todavía no hay convocatoria oficial, todo está previsto para el arranque del jueves 23 de febrero.

La Cámara alta comenzará el día con la sesión preparatoria –con la presencia de todas las fuerzas parlamentarias-, en la que serán reelegidas las actuales autoridades del Senado.

Claudia Ledesma Abdala (Frente Cívico de Santiago del Estero) continuará como presidenta provisional; Carolina Losada (UCR) lo hará como vicepresidenta; Maurice Closs (del misionero Frente Renovador de la Concordia) renovará como vicepresidente primero y Guadalupe Tagliaferri (PRO) como vice segunda.

Lo mismo sucedería con quienes están a cargo de las secretarías de la Cámara alta: María Luz Alonso (Secretaria Administrativa); Marcelo Fuentes (Secretario Parlamentario); Mariano Cabral (Prosecretario Administrativo); Juan Pedro Tunessi (Prosecretario Parlamentario); y Diego Bermúdez Bringue (Prosecretario de Coordinación Operativa).

Para la segunda convocatoria del día el panorama es distinto. El oficialismo propondría sesionar para avanzar con dos proyectos incluidos en la convocatoria a extraordinarias, que cuentan con dictámenes de comisión.

Uno será la ley de Alcohol Cero, proyecto que modifica el artículo 48 de la Ley 24.449 reduciendo de 0,5 gramos a 0 el grado de alcohol en sangre permitido a los conductores de vehículos en todas las rutas nacionales.

El otro será el proyecto de ley sobre capacitación obligatoria de derechos de niñas, niños y adolescentes, inspirado en el caso de Lucio Dupuy.

Para ello, el FdT deberá garantizar la presencia de propios y aliados y conseguir el quórum.

Esto es porque la alianza opositora Juntos por el Cambio insiste en su obstinada postura de no acudir al recinto y bloquear todos los proyectos oficialistas mientras el gobierno continúe con el juicio político a los integrantes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Durante diciembre en el Senado se cayó la posibilidad de tratar una serie de iniciativas por la debilidad numérica del FdT.

Por entonces, el jefe del bloque oficialista, el formoseño José Mayans, seguía recuperándose de un problema médico y el tucumano Sergio Leavy no se encontraba en el país.

El interbloque de JxC había decidido no bajar al recinto hasta que que el FdT garantizara los 37 necesarios para funcionar.

Los números no eran suficientes: de 35 bancas que tienen sus dos bloques (Frente Nacional y Popular y Unidad Ciudadana), quedó con 33 y llegaba a 36 con al apoyo de tres aliados clave, el rionegrino Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro), la misionera Magdalena Solari Quintana (Frente de la Concordia Misionero) y la riojana Clara Vega (Mediar Argentina).

Ahora el oficialismo tiene asistencia completa y con esa tríada aliada garantiza el cuórum.

No obstante, JxC seguirá alineado en la defensa acérrima de los jueces de la Corte Suprema, quienes durante todo 2022 violaron la independencia de los Poderes de la República, arrogándose funciones del Legislativo y el Ejecutivo.

Aunque el bloqueo de la bancada macrista ha dado resultados, especialmente en la Cámara de Diputados donde el oficialismo no tiene quórum propio, desde el propio interbloque opositor prometen “flexibilizar” su postura cuando comience el periodo de sesiones ordinarias debido a las críticas de distintos sectores de la sociedad por paralizar el Congreso y no tratar temas de urgente resolución para la ciudadanía.

Cristina Kirchner presidirá una sesión del Senado por primera vez desde el atentado en su contra es una publicación original de El Ágora Digital.