No iba a ver vacunas y las hubo. No iba a vacunarse rápido y se vacunó. Las residencias en Madrid eran cosa de Pablo Iglesias y en realidad las gestionaba Díaz Ayuso, que ahora se niega a que halla una investigación sobre el asunto. Los indultos eran inconstitucionales e ilegales y resulta que son constitucionales y legales en toda línea.

Por mayoría absoluta le voltearon dos iniciativas contra el indulto. Y se negaron a admitir el dictado de la representación popular electa del Parlamento, llamando a todos los partidos que le votaron en contra "traidores a la Patria". Nada extraño porque también llamaron al gobierno elegido en las urnas como ilegítimo.

Finalmente, puestos en libertad los presos del procés y tras sus declaraciones de seguir luchando por la independencia y la república siguiendo las formas y normas constitucionales, lanzaron una campaña aduciendo que estas personas no estaban arrepentidas y por lo tanto no les cabía el indulto. En primer lugar, ser republicano o pretender un derecho de autodeterminación no es ningún delito en España ni en la mayoría de las democracias avanzadas y en segundo lugar, la figura de arrepentimiento no existe en ningún artículo constitucional sobre el indulto. Ellos se la inventan.

Esta batería de ataques, mentiras y desinformación a la opinión pública fue ejecutada por grandes medios de comunicación, algunos con el prestigio de ABC, incluso incorporando bulos de su cosecha, perdiendo todo prestigio periodístico, por si alguna vez los tuvo o lo tuvieron.

¿Qué hay detrás de toda esta maraña sucia? Obviamente el poder, pero además la Justicia desde hace un tiempo está desembarazando una trama de corrupción sistemática y sucia del Partido Popular, pero que todavía no ha sido desmantelada completamente y muchas de sus estructuras institucionales, sociales y medios de comunicación siguen intactas. La regeneración pretendida del Partido Popular con Pablo Casado, después que el gobierno de Rajoy fuera echado de la Moncloa por corrupción, no parece ser más que una continuidad del pasado. Muchos personajes de aquella vieja guardia de corrupción todavía se pasean con puestos de relevancia en el partido. Eso por un lado. Por otro, los 140 Mil Millones de euros que provienen de la Unión Europea como ayuda a España tras la crisis del Covid19 para la recuperación económica, ha provocado la desesperación de las derechas. Mucho dinero a repartir, pero que serán administrados por el gobierno central y le impide al PP tocar un céntimo. La cuestión a sacado de juicio a Pablo Casado y sus huestes desde el mismo momento de su adjudicación. 

Pablo Casado se reunió con 29 embajadores de la Unión Europea vinculados con su partido para obstaculizar la llegada de esos fondos europeos a España y en detrimento de España. Como si fuera poco, cuando esta fórmula no funcionó, el Partido Popular envió un documento al Comisario de Justicia de la Unión Europea poniendo en tela de juicio el Estado de Derecho en España exigiendo la dimisión del gobierno central español, nuevas elecciones e impedir obviamente que los 140 mil millones destinados a nuestro país fueran administrados por el gobierno de Pedro Sánchez, cuestión que tampoco le funcionó.

Nada extraño pues, que el indulto se use como un nuevo intento de desestabilización institucional del Estado, lo han inducido de mil formas, con bulos, caretas, engaños, denuncias falsas e insultos apoyados por una prensa cómplice. Y como en los viejos tiempos del franquismo, el uso de "traidor a la patria" que sirvió para justificar el genocidio español, hoy lo vomitan sin tapujos para "aniquilar" a sus adversarios políticos o a aquel que no piense como ellos, con urnas o sin urnas, les da igual. 

Además, 140 mil millones de euros es mucho dinero del que no podrán tocar un céntimo. Esto los ha sacado de todo juicio.