Muchas veces, en los comentarios que buenamente dejan los amigos de esta pagina, me han pedido o planteado, la posibilidad de una muestra fotográfica. En otras oportunidades, charlando en la calle me han planteado la más loca idea aun, de publicar en un breve libro, muchos de los textos e ilustraciones que han ido dando forma a este blog.
“Che, vos que sos escritor y fotógrafo, por que no publicas un libro?”…
En realidad no tengo respuestas o tengo muchas y siempre trato de cortar la charla con algún chiste y regresar a lo cotidiano: el laburo, los muchachos, el asado del viernes o la minita que pasa…
En realidad no soy escritor, ni fotógrafo, ni dibujante; tampoco soy un narrador. Siento que son palabras que me quedan grandes, como “traje de difunto”…no me pertenecen, no me visten…
En esto de irse buscando uno mismo, de irse dibujando con la imagen que nos devuelve el espejo, podría decir que soy una suerte de aprendiz de recopilador…voy juntando cositas, como piedras en el campo, las pulo un poquito y las guardo en la cajita del alma. De vez en cuando, meto la mano en la caja, saco alguna y la pongo en esta vitrina de Internet.
Si, me gusta mas lo de “aprendiz de recopilador” y lo que mas recopilo son sensaciones, sueños, palabras que construyen o han construido sueños; las imágenes son solo eso, instantáneas oníricas de un recuerdo, de un amor, de una ternura o algún viejo dolor.
Se me hace (desde mi propia significación) que un recopilador, constituye una suerte de coleccionista y como tal, muchas veces corre el riesgo de tornarse compulsivo; de allí que, para tener ese pieza especial que le niegan sus propias palabras, recurra a la apropiación de palabras de otros. Por ello es que aparecen textos o imágenes que no me pertenecen pero cuyos dueños, quizás, recopilen sueños y palabras similares a las nuestras.
Creí preciso hacer esta aclaración, frente a algunos reiterados pedidos de amigos demasiado buenos y que significan las palabras de manera distinta a la mía.
Para todos ellos y para todos los que circunstancialmente pasan por este breve escaparate virtual mi abrazo.
“Che, vos que sos escritor y fotógrafo, por que no publicas un libro?”…
En realidad no tengo respuestas o tengo muchas y siempre trato de cortar la charla con algún chiste y regresar a lo cotidiano: el laburo, los muchachos, el asado del viernes o la minita que pasa…
En realidad no soy escritor, ni fotógrafo, ni dibujante; tampoco soy un narrador. Siento que son palabras que me quedan grandes, como “traje de difunto”…no me pertenecen, no me visten…
En esto de irse buscando uno mismo, de irse dibujando con la imagen que nos devuelve el espejo, podría decir que soy una suerte de aprendiz de recopilador…voy juntando cositas, como piedras en el campo, las pulo un poquito y las guardo en la cajita del alma. De vez en cuando, meto la mano en la caja, saco alguna y la pongo en esta vitrina de Internet.
Si, me gusta mas lo de “aprendiz de recopilador” y lo que mas recopilo son sensaciones, sueños, palabras que construyen o han construido sueños; las imágenes son solo eso, instantáneas oníricas de un recuerdo, de un amor, de una ternura o algún viejo dolor.
Se me hace (desde mi propia significación) que un recopilador, constituye una suerte de coleccionista y como tal, muchas veces corre el riesgo de tornarse compulsivo; de allí que, para tener ese pieza especial que le niegan sus propias palabras, recurra a la apropiación de palabras de otros. Por ello es que aparecen textos o imágenes que no me pertenecen pero cuyos dueños, quizás, recopilen sueños y palabras similares a las nuestras.
Creí preciso hacer esta aclaración, frente a algunos reiterados pedidos de amigos demasiado buenos y que significan las palabras de manera distinta a la mía.
Para todos ellos y para todos los que circunstancialmente pasan por este breve escaparate virtual mi abrazo.
