La religión, pienso se puede definir como dogma hacía una divinidad, la cual con fe se puede creer en ella, y venerarla por sentimiento, o temor.

Existen cuatro Religiones predominantes a saber, el cristianismo, el islam, el budismo y el hinduismo. Sus incondicionales son algo más del 70% de la población mundial, siendo el 30% para los cristianos, el 25% para los seguidores del islam y el resto se lo reparten el budismo y el hinduismo.

Mi visión sobre la religión está basada desde el punto de mira del agnosticismo, por lo tanto, considero que mientras la ciencia no certifique lo divino, la posición de la fe tiene, según mi criterio, posición cero.

Poco se del budismo, nada del hinduismo, algo del islamismo y mucho del cristianismo, porque con ella, y la fuerza de una dictadura, la sociedad me amamanto. Por cierto, con mucho miedo. La entrada a la iglesia, el silencio y la escasa luz, que habita bajo su bóveda me causa terror.

Terror, es lo que causan las religiones, por eso se siguen. Lo que en estos momentos ocurre en Afganistán es auténtico pavor.

Lo primero que inculcan las religiones es el miedo a la Muerte. Pero la vida es lo que transcurre entre el nacimiento y la muerte, Por lo tanto, al engendrarnos, tres cosas son las que tenemos seguras, el nacimiento, la vida y la muerte.

Antes del nacimiento no hay nada, y después de la muerte tampoco, con lo que los líderes religiosos, intentan hacer creer que sí, hay vida y, la única forma de saberlo es obedecer, con fe ciega al adoctrinamiento, para beneficio de los acaudillados, y en lo que, ni ellos mismos creen.

Por eso, está muy bien que nos aterroricemos con lo que estamos viendo en Afganistán, pero si, de verdad queremos, acabar con esa podredumbre. Desentendámonos primero de nuestra mierda, para poder después limpiar la del vecino.

Fuera la religión y los clérigos de las escuelas. Política laica. Los Estados que no traten bajo ningún concepto con estados que tengan la religión en el poder, o cerca de él.

Los afganos necesitan ayuda, pienso quien mejor se la puede prestar somos los occidentales. Empecemos por el control de suministro de armamento y munición al gobierno Talibán, aunque sea para defensa, ya que ellos no se tienen que defender de nadie, son los agresores. Después que los expertos trabajen en hacer lo preciso y necesario para que los afganos se deshagan de la religión en el poder del Estado.

Y no olvidemos, respetar a las religiones y sus clérigos, eso sí, sin olvidar sacarlos de las escuelas y del Estado, en nuestro propio país.