La Empresas huyen de Catalunya ante la amenaza del gobierno de la Generalitat de proclamar unilateralmente la independencia.

Los planes secesionistas de los independentistas catalanes asustan a los amos del dinero, de Londres y de otras partes del mundo, donde están los fondos de inversión. Hay cola ante CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) para notificar, tras la aprobación por el gobierno de España de facilitar los trámites, el cambio de la sede social de las empresas del IBEX35.

Generalitat de Catalunya, como la menos fiable del Estado. Las imágenes pues han sido el detonante para activar el mecanismo de preocupación.

El anuncio de la creación de la Hacienda Catalana, paralela a la española, pienso que también es un motivo para avivar el miedo, ya que supondría duplicar los impuestos de las empresas, o al menos así se cree.

Desde Europa se ha reprochado al empresariado catalán de no haber actuado antes, para pedir la intervección del Gobierno de España ante un conflicto que debiera haber sido parado. Hay quienes dicen que sí se aviso. Personalmente recuerdo advertencias, de varias veces, y públicamente, por el fallecido José Manuel Lara, por entonces Presidente del Grupo Editorial Planeta, declarando que si Catalunya se independizase su grupo marcharía a Madrid. Como así lo han hecho ahora.

Decir que la marcha de más 500 empresas, de primer orden económico de Catalunya, es de menor importancia, para mi punto de vista, es una irresponsabilidad.

Mi opinión es que, los que están llevando el procés, no han valorado la correlación de fuerzas entre ellos y a quienes se enfrentan, en este caso nada más y nada menos que a los mercados.

Está muy bien ser anticapitalista, pero creo más en dominar el capital para poder redistribuirlo lo mejor posible, que hacer simplemente un cambio de manos, al menos eso, no es santo de mi devoción.