No, no crean los que pasan por aquí de vez en cuando y a los que agradezco las visitas, que sigo "de belingo" desde el último post que publiqué, hace ya un par de meses.Ya dije que ahora mismo le dedico más tiempo a las costuras que a la escritura, así que publico con más asiduidad (tampoco todas las semanas, no se vayan a pensar) en el blog de patchwork (Ligia Patch) que en éste.Pero hoy me entró la morriña y he venido por aquí a contarles que seguía con "mis rutinas". Cuando he buscado el número de veces que había escrito sobre ellas, me encontré con uno de los primeros artículos que escribí en el blog, hace nueve años (todavía no me dejaba nadie comentarios...) y me ha hecho sonreir.Como siempre me gusta compartir mis sonrisas, les dejo el enlace para que ustedes lo hagan también.Se titula "Los hombres de mi vida" y lo pueden leer pinchando AQUÍHace nueve años de "aquellos hombres", y ya saben que hoy mi rutina es otra: coser, nadar, estudiar italiano... y poco más. En fin, ya ni "tropiezo" con hombres en mi vida y si coincido con alguno, ni me miran, ja, ja...Cómo cambia la vida en pocos años, cómo se estropean los cuerpos (como diría tantas veces Lina Morgan...). Del último párrafo de aquel artículo lo único que permanece es "el beso fugaz de mi marido antes de dormir" porque la verdad es que ya ni siquiera "prepara la cena"...