El pasado finde fue muy galáctico.
Y no lo digo por la "comida de navidad del grupo de amigas" que tuve el domingo, que fue superestelar, sino porque tanto el viernes como el sábado nos tragamos dos pelis de esas superfuturistas: El Episodio 8 de la Saga Star Wars (La Guerra De Las Galaxias, para las antiguas): Los últimos Jedi (yedai) y Valerian, la ciudad de los mil planetas.
Una me gustó y otra me pareció una chorrada, ¿adivinas cuál fue cuál?
Veamos, yo soy starwarfan, pero sólo de imaginería. Es decir, me encanta poner una pegatina gigante con la Estrella de la Muerte en casa (y que Tx se lleve un sofocón) y fui capaz de ir a dos tiendas Celio a por esta camiseta:
Pero es que me parecía chulísima.
Ahora, toda esa mitificación y esa filosofía starwariana que tienen los más frikis me la suda mucho. Se sorprendía mi amigo Peritoni (del extinto blog Pikitonis) de que me gustaran las pelis de La Guerra De Las Galaxias y abominara de la saga de El Señor De Los Anillos (puagggghhhhhhh, vomito en alto el asco que me da). Muy sencillo, Star Wars es acción, diversión, emoción... y los anillos son gente aburrida andando todo el rato. Lo mismo se refiere a que ambas tienen el componente de la lucha entre el bien y el mal, criaturitas extrañas y la presencia del elegido como salvador de la humanidad. Pues bien, vale, a mí ésa es la parte que precisamente me trae al pairo de Star Wars: no me voy a rasgar las vestiduras como han hecho muchos porque un personaje fundamental cambie su manera de ver el universo o porque no se sigan las directrices de la saga... ¡de hace 40 años! No, mira, paso, soy así de frívolo e insustancial: voy a ver una película por lo que es, no por lo que significa ni por cómo está integrada en una saga interminable. Pero, eso sí, BB8 me parece simpatiquísimo y los porgs un amor. Y me compro camisetas, casquitos y bolas de navidad temáticas.
Si has llegado a leer hasta aquí y eres fan ya me habrás crucificado pero chico, si alguna vez has leído este blog creo que es lo esperable en mí, ¿no?
Como esperable es Los Últimos Jedi.
No me refiero a que sea previsible en cuanto a argumento, que tiene unos cuantos giros, sino que es lo que esperaba de ella: acción sin tregua, batallas, persecuciones, emoción... y un buen final.
Ahora, también se puede hacer cansina porque es muy larga (dos horas y media) y tiene una estructura bastante repetitiva: persecución / batallita / rollo jedi / nueva persecución / nueva batallita / más rollo jedi etc etc etc.
Por ejemplo, a mí toda la parte (tranqui, no hay spoilers) de la ciudad casino y lo de Benicio del Toro me parece totalmente prescindible. Oh, no, si es la parte de crítica social, ecológica y política de la películaaaaaa (ya me han dicho) y además es un homenaje a la escena de La Guerra De Las Galaxias de... Mira, paso, no aporta nada. Pero nada de nada.
En definitiva, una peli disfrutable, entretenida y para pasarlo bien. Y con una estética y fotografía DE DIEZ. Y los frikimaníacos encima le pueden sacar mil significados, cuatro mil referencias y volverse locos del potorro con cierto personaje flotante.
Cosillas:
¡El pelo de Laura Dern, por faaaaaaavoooor! Necesito esa peluca. ¡Y cómo le sienta el vestido cuellojirafa!
Y vuelve a salir, esta vez con dos frases más y alguna acción aislada... ¡¡¡mi queridísima Chanel number 3!!!
Sí, lo del fallecimiento de Carrie Fisher es una pena, yo no sé qué van a hacer para la próxima peli.
Cogimos entradas para la sesión golfa de las 00:00 horas. Anuncios + Dos horas y media de peli... ¡Salimos del CCR A LAS TRES DE LA MAÑANA! Y encima habíamos dejado el coche en la puerta, fuera, y cuando vamos a salir... tatachannnn, todas las puertas del CCR cerradas. Tuvimos que salir por el aparcamiento. Aventura galáctica, vamos, uuuuuh.
Al día siguiente Tx se empeñó en deleitarme con un arroz con bogavante y, créeme, nos tiramos toda la mañana buscando HOJAS DE SALVIA que necesitaba para la receta. ¿Te puedes creer que las encontramos? Pues no. ¿Dónde se compran hojas de salvia que no sea en un herbolario (que además serán secas)???
Online está carísima...
O "embasada"
En fin, al menos el plato, sin salvia, quedó así de aparente:
¿Alguien sabe dónde se pueden comprar hojas frescas de salvia en esta ciudaaaaaad?
Y por la tarde, resposando el arroz... Valerian y la ciudad de los mil planetas, en 3D y en el sofá.
Huy hijaaaaaa, qué Quieres que te diga.
¿Que quieres acción? Pues la hay.
¿Que quieres infografía último modelo e imágenes impactantes? Pues las tienes.
¿Que quieres... un guión en el que en los 20 primeros minutos no te enteras de nada pero al final resulta que es más lineal que lo que aspiraba Kate Moss? Pues ea.
¿Que quieres unos protagonistas con carisma cero y un villano blandengue? Pues también.
¿Que quieres humor que no hace gracia? Lo tenemos, oiga.
¿Que quieres que salga Rihanna y te monte un numerito espectacular que no viene a cuento -ni ella, ni el numerito, ni el personaje- pero rellena minutos y sale muy mona? Eh, Rihanna, ¿cuánto cobras?
Porque vamos, muy impresionante, muy visual, pero la sensación global es... psa.
Luc Besson ya hizo El Quinto Elemento, que era bestial. Y ésta se queda en un intento de repetirla, pero sin personajes con empaque, sin gracia, sin... nada.
Te puede entretener, pero es todo envoltorio. Por dentro es.... pfffffssssss.
Y ese niñato protagonista, por favoooor. Yo comprendo que es lo que le gusta a las adolescentes y a los pederastas, pero es que no transmite nada, no es creíble como héroe de acción y además físicamente tiene unas bolsas en los ojos que lo convierten en un pseudoLeonardo DiCaprio de baratillo. La chica tiene algo más, pero tampoco te la crees por su pose permanente de listilla. Y del malo ya ni hablemos.
Francamente, no es que sea deleznable, pero una vez vista, olvidada.
Y el domingo comida de la maripandi.
¿Y tú qué? ¿Ya has tenido tus celebraciones navideñas multitudinarias???
