Leyendo esta mañana EL UNIVERSAL, me encontré con un artículo de ELÍ BRAVO en donde daba cuenta del ya por todos conocido nivel de formación que detentan, y ostentan, los miembros de los diferentes entes, dependencias o institutos del actual gobierno.

Hacía referencia ELÍ, al hecho de que acababa de descubrir que la ONIDEX había vuelto a cambiar la planilla de inmigración para entrar al país y en la misma se dejaba ver claramente por escrito el dominio que, del despreciable idioma del imperio (léase, inglés), tiene el vernáculo personal de ese ente del gobierno.

Argumentaba ELÍ, que se encontró con palabras mal escritas en tal cantidad, que él prefiere creer que se trata o bien de una licencia o libertades que se tomó el redactor del documento o bien que se trata de una estrategia para intentar confundir a los gringos. Nada más empezar a leer la planilla, la persona que sólo lea inglés aparte de su lengua nativa (diferente al español) se encontrará que se le pide el número del pasaport en lugar del passport. De igual forma, al estudiante se le llama estudent en lugar de student y como esa, infinidad de metidas de patas hasta el extremo de hacer una transcripción literal de la palabra “moneda” por coin en lugar del currency del lenguaje comercial.

Recuerdo cuando el presidente Chávez, haciendo uso de su proverbial verbo, convirtió en un tris el edificio de oficinas de LAGOVEN (ubicado en Los Chaguaramos) en la flamante Universidad Bolivariana. Al momento de la “inauguración” de la sede (que no del edificio de la década de los 60) los reporteros a los que se les permitió cubrir el acto protocolar (y para el cual debieron contar con carnets identificadores) se encontraron con que en los mismos aparecía impreso en letras bien grandes la palabra UNIVERCIDAD. Desde ese momento, mucha ha sido el agua que ha corrido bajo los puentes, hasta el punto que se llegó a ver a un general (al frente de CADIVI) aparecer en una mini cadena televisiva hablándonos (con todo dominio y sentido de propiedad) sobre el recuperamiento de la economía en vez de la recuperación de la misma. Y el ejemplo de castigar inmisericordemente a un Cervantes, llegó hasta la prensa escrita afecta al régimen. En el periódico DE FRENTE, impreso en Barinas, aparecía en la primera plana una noticia en la que se señalaba: Venezuela y Bolivia, ”paíces” (sic) más democráticos de América Latina. Tan democráticos somos, que nadie está obligado a “adquerir” un dominio medianamente aceptable de las reglas de la ortografía.

Y si el lector cree que sólo se trata de un brutal desconocimiento de las reglas de ortografía, sirva citar la vez en que revisando la página del CONSEJO NACIONAL ELECTORAL (CNE) me encontré que ya no podía echarme mis escapaditas a BOA VISTA en Brasil, pues de acuerdo al mapa que mostraba ese portal, el Estado Bolívar limita al sur con COLOMBIA.

Es por eso que nada tiene de extraño que en la hoja de captura que la INTERPOL realizó con los datos suministrados por el gobierno venezolano, aparezca que el prófugo NIXON MORENO sea un individuo de unos escasos 34 centímetros de estatura (0,34mts) y unos 90 kilogramos de peso, lo que lo convierte, sin lugar a dudas, en el enano más pesado del mundo que ha logrado evadir a una custodia policial que, apostada a las puertas de la Nunciatura Apostólica, estaba al acecho del mismo, las 24 horas del día.