El Convento de los Jacobinos en Toulouse (Francia) es una joya arquitectónica imprescindible de visitar en dicha ciudad.
Es un antiguo convento de la Orden de los Predicadores (Dominicos) construido a lo largo de los siglos XIII y XIV totalmente en ladrillo rojo, muy representativo en la arquitectura del Languedoc.
En su Iglesia se encuentra enterrado el dominico teólogo y filósofo Santo Tomás de Aquino.
Es espectacular en la iglesia contemplar la columna con 11 brazos y 22 metros de altura conocida como La Palmera.