Crónica: @mr.barciela
En 1997 el músico y productor Juan de Marcos Gonzales junto con el estadounidense Ry Cooder, deciden homenajear con un documental, al mítico club Buena Vista Social Club de La Habana, Cuba, 50 años después de su cierre. Para esta grabación reúnen a los músicos más populares que solían reunirse para tocar en dicho club. Entre los que se encontraban el gran Compay Segundo, Omara Portuondo, Ibrahim Ferrer, Eliades Ochoa… Sin duda un regalo para el mundo de la música, ya que pudieron reunir a tiempo a todos estos soneros cubanos y dejar constancia del sonido cubano que se realizaba en los años 50.
Afortunadamente, algunos de esos músicos siguen con nosotros y lo más importante, tienen consigo las ganas de seguir tocando e interpretando, el repertorio que cada noche los amantes de la música cubana podían escuchar en ese mítico club.
Ayer la ciudad de Madrid dejaría por unos minutos de respirar ese aire de ciudad, para trasladarse décadas para atrás, y traer un pedacito de aromas cubanos. Siendo 6 de agosto, donde gran parte de los habitantes de la capital marcharon por vacaciones, quedando las calles más tranquilas. En el patio central del centro cultural Conde Duque, el músico Eliades Ochoa se encargaría de mostrar dichos aromas en forma de música.
Nacido en 1946, en la ciudad de Songo la Maya, Santiago de Cuba. Eliades Ochoa es reconocido como uno de los grandes soneros dentro de la historia cubana y miembro de la Buena Vista Social Club. Su música respira aires tradicionales, de ritmos cubanos como el son, el bolero, la habanera, etc. Su carrera adquiere una fama importante gracias a la grabación de dicho disco y documental en 1997. A partir de entonces no ha dejado de trabajar, siendo reconocido dentro del mundo de la música y llamado para colaborar con infinidad de músicos, de la talla de Manu Dibango, Rubén Blades, Ry Cooder, Tourmani Diabate, Bunbury y artistas dentro del mundo mainstream como C. Tangana, en su último disco El Madrileño.
Eliades Ochoa se presentaba en Madrid, dentro de las jornadas de Veranos de la Villa, para presentar su último disco Guajiro, en el cual ha podido contar con la colaboración de Blues Charlie Musselwhite, Ruben Blades y Joan Wasser. Disco que recoge sonidos llenos de tradición cubana, pero suenan muy contemporáneos en estos tiempos.
A eso de las 22:00 de la noche, con sold out en las entradas, las luces del patio central se apagaron y comenzaron a salir los músicos de la Star of Buena Vista Social Club, ataviados de blando, para activar el ritmo en los cuerpos de los asistentes, que nos encontrábamos en las butacas. De solemne negro y siempre con su mítico sobrero y su pequeñea perilla, entraba en el escenario Eliades Ochoa junto con una gran y calurosa ovación interpretando Creo en la Naturaleza, canción de su nuevo disco. Sin duda, una declaración de intenciones para todas las personas presentes.
Eliades continuó el concierto con la canción Soy guajiro, en la cual previamente tuvo que cambiar su guitarra, ya que una de sus cuerdas decidió irse de vacaciones, como el propio artista comentó. Vinieron más canciones de su nuevo lp como Ando buscando una novia o Abrazo de luz. Quiso hacer una para especial a la hora de interpretar Chan Chan, para homenajear a Compay Segundo, produciendo una gran ovación de todo el público presente. El espectáculo siguió con más boleros, habaneras, son cubano, como Vamos a bailar un son, canciones como El carretero, Pajarito voló, Se soltó un león, Ay Mama que Bueno, en la cual hizo otra parada en el espectáculo, y poner en pie al productor Carlos Varela, presente entre el patio de butacas. Para dejar para el final, del repertorio, Píntate los labios María y El cuarto de Tula, canciones que hicieron que el público se pusiera en pie, tomaran a una pareja de baile y comenzaran a bailar al ritmo de la música. Eliades Ochoa consiguió trasladar al público, desde el solemne patio central, Conde Duque, al Buena Vista Social Club.
Finalmente y volviendo a hacer referencia la primera canción, Creo en la Naturaleza. Eliades Ochoa daba gracias a la naturaleza y le pedía más años de vida y energía para seguir haciendo música y continuar interpretando su repertorio a su gran público. Como canción final y fuera de tiempo, Eliades Ochoa cerró este magnífico concierto con Candela.
La entrada Crónica concierto Eliades Ochoa en el ciclo «Veranos de La Villa» de Madrid apareció primero en .
