Recientemente se ha celebrado el día mundial de los océanos y, como es evidente, en este día es inevitable pensar en los estragos que nuestras acciones diarias deterioran los mares y océanos de manera continua.

Las corrientes oceánicas son las encargadas de igualar el clima del planeta, además de albergar millones de especies de vida marina. Debemos de tomar conciencia de que los amantes de la náutica y la naturaleza Podemos cambiar el destino de los océanos cambiando algunos de nuestros hábitos. Por eso, Náutica y Deportes Tenerife ha decidido compartir algunos consejos que podrían ayudar a disminuir la contaminación de los mares.

1. Disminuye el consumo de energía y tu huella de carbono.

Es importante viajar con una velocidad reducida, manteniendo las velocidades constantes. Debemos navegar con responsabilidad y patronear de forma eficiente la embarcación. También podemos tratar de disminuir nuestro consumo con pequeños cambios como el de bombillas por focos de bajo consumo.

2. Realiza pesca sostenible.

El hábitat de los peces se ha visto mermado en los últimos años debido a la pesca masiva. Esta es la actividad marítima por excelencia. Para evitar realizar una pesca irresponsable debemos conocer qué especies están protegidas y en peligro de extinción para seleccionar con qué peces podemos quedarnos

También, es importante tener en cuenta que al consumir pescado podemos colaborar a ir en contra de la pesca sobre-explotada, eligiendo productos de pesca local, donde no han sido recolectados de manera masiva.

3. Practica deportes marítimos responsables con el medio ambiente.

Algunas prácticas como la vela o el kayak, u otras como el surf, windsurf o paddle surf, permiten disfrutar del mar respetando el entorno. En ninguna de estas actividades existe la necesidad de desechar residuos en el mar y tienen una alta implicación con el medio marino.

4. Reduce el consumo de plásticos.

El plástico que a diario usamos en nuestras casa y en la calle son los que, finalmente, terminan apareciendo de una manera u otra en el mar.  Estos, contribuyen a la destrucción del hábitat marino, puesto que con su presencia matan a múltiples animales al año. Para evitar esto, se pueden utilizar envases de cristal o de materiales reutilizables, además de utilizar una bolsa de tela al ir de compras.

5. Cuida y limpia las playas.

Mantener limpias nuestras playas es el primer paso para no contaminar los océanos y fondos marinos. En tus visitas a la playa  procura recoger los residuos que se generan durante el día. Separa y deposita la basura en los contenedores correspondientes antes de irte.

Además, aprovecha y disfruta de la costa sin interferir en su naturaleza, y evita mover rocas o corales.

6. Evita comprar productos que se aprovechen de los recursos marinos.

Comúnmente en las localidades marítimas se suelen vender artesanías donde se emplean productos marinos como estrellas de mar, conchas, caracolas, etc. Sin embargo, estos componentes se adquieren alterando el ecosistema marino, perjudicando su desarrollo y deteriorándose para siempre.

7. Infórmate sobre el mar.

Para poder afrontar el tema de la contaminación de los mares debemos conocer cómo funciona y cómo afecta al resto del mundo. De esta manera, podremos y sabremos cómo afrontar el problema, que afecta tanto a la vida en el océano como la vida en la tierra.

Se puede investigar a través de documentales, libros y revistas dedicadas al tema y concienciadas con el medioambiente.

Podemos decir que, preservar el ecosistema marino está en nuestra mano. Debemos concienciarnos de que con pequeños gestos podemos generar un gran impacto de cambio ¡Colaboremos para mantener vivos nuestros océanos!