Le Mans es escenario de dos carreras de 24 horas que son referencia de la resistencia mundial en automovilismo y motociclismo. Sin embargo, el GP de Francia de Motogp no desmerece a ninguno de los dos eventos, ya que también el circuito de La Sarthe desprende cierta aura especial. Tras el GP de España, los pilotos de la categoría reina se juegan el pan -en tiempo de renovación de contratos- en Francia. Fabio Quartararo ejerce de héroe local.

Le Mans es uno de los escenarios clásicos del Mundial de Motociclismo. Presente en la serie desde hace más de medio siglo, su debut en el campeonato tuvo lugar en 1969. La relación del circuito de La Sarthe y el Mundial fue tan guadianesca como intensa durante las tres siguientes décadas. Desde su retorno en el año 2000 no ha salido del calendario, ofreciendo carreras espectaculares. Jorge Lorenzo es el piloto más laureado en Le Mans tras conquistar cinco victorias en MotoGP y una en 250cc.

De regreso al presente, el GP de Francia llega en el mejor momento del héroe local. El vigente campeón Fabio Quartararo no pudo superar a Pecco Bagnaia en Jerez, pero llega como líder del Mundial con siete puntos de ventaja sobre Aleix Espargaró. Su renovación por Yamaha parece cada vez más cercana y aunque la M1 tiene algunos puntos débiles, en su conjunto aun es una moto lo suficientemente competitiva para pelear por el título. Eso sí, Quartararo sabe que hay escenarios en los que no puede fallar.

Uno de ellos es Le Mans, ante su público. El trazado francés ha sido durante una década uno de los escenarios favoritos de Yamaha, siempre con permiso de Honda. De hecho, desde 2008 las dos firmas niponas se han alternado en lo más alto del podio. Todo cambió en 2020 cuando Danilo Petrucci entregó la victoria a Ducati. El australiano Jack Miller repitió un año más tarde. Y lo cierto es que la situación es antagónica si uno mira el proyecto de Yamaha y Honda y luego echa un ojo a la apuesta de Ducati.

Con todo, Fabio Quartararo buscará su primer triunfo en casa y la primera victoria de un piloto francés desde el éxito de Louis Rossi durante la edición de 2012 del GP de Francia de Moto3. Por su parte, Marc Márquez llega con obligación de dar un nuevo paso al frente si quiere estar un poquito más cerca de la cabeza. No será fácil acercarse a la lucha por el triunfo si Pecco Bagnaia rinde al mismo nivel que lo hizo en Jerez. Y no es fácil, pero se antoja factible ver de nuevo un Pecco arrollador.

El dubitativo inicio de Ducati con las distintas Desmosedici y versiones de su motor generó una cierta confusión en la firma de Borgo Panigale. Con todo, el paso de los Grandes Premios ha dejado patente que la Ducati es muy rápida, ya sea en su versión GP22 con motor de última generación, en la variante GP22 con el motor híbrido a mitad de camino de la especificación del año pasado y de esta temporada o como GP21. Y claro, eso coloca a Pecco Bagnaia, Jack Miller, Johann Zarco -segundo piloto local-, Jorge Martín y Enea Bastianini, como mínimo, como aspirantes al triunfo.

Y mientras las aguas de Ducati se calman, la tempestad ha llegado a Suzuki. La firma japonesa se va de MotoGP a finales de 2022. Al menos eso comunicó a los miembros del equipo en el test oficial de Jerez. Desde entonces, el comunicado oficial que iba a anunciar su salida se ha convertido en un tibio mensaje que habla de negociaciones con Dorna. Romper el contrato con el promotor, firmado hasta 2026, no parece tarea sencilla y las cifras mareantes que se mueven pueden decantar la balanza hacia un lado u otro.

Mientras Suzuki negocia con Dorna su marcha o se replantea su salida, vaya usted a saber, la única realidad tangibles es que la GSX-RR funciona y Álex Rins y Joan Mir han sido dos de los pilotos más regulares de lo que va de temporada. Bien es cierto que Rins viene de un Gran Premio de España para olvidar y con todo está cuarto en la clasificación general. Por su parte, Joan Mir es sexto, aunque es cierto que ninguno de los dos ha conseguido una victoria y sólo Rins ha pisado el podio en la presente temporada para la firma de Hamamatsu.

Conocer el equilibrio entre Ducati, la Yamaha de Quartararo, la Honda de Márquez y las Suzuki ya parece complejo, pero hay que sumar en la ecuación a Aprilia. La firma de Noale con Aleix Espargaró al frente sigue dando muestras de mejoría, algo que quiere aprovechar Maverick Viñales para volver a los puestos de cabeza que hace no tanto ocupaba con Yamaha. Y, por último, KTM. La firma austriaca se deja ver de forma puntual, pero lo cierto es que la firma está teniendo problemas para ser competitiva.

Horarios Gran Premio de Francia 2022 (MotoGP)

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