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Día de la raza

¡Saludo cordial, amigos de Fincas de turismo! El mes de septiembre suele ser largo y agotador, como colombianos añoramos un descansito extra, en este mes nunca llega. Los festivos siempre brillan por su ausencia en septiembre, aunque, necesario es decirlo, las fiestas no faltan. Nuestras Casas Campestres siguen recibiendo visitantes, aunque haya ausencia de feriados. Especialmente la celebración del amor y la amistad que es la más representativa del noveno mes del año. El fatídico mes sin días feriados. Por fortuna no dura sino 30 días, la ausencia de puentes festivos termina con la llegada de Octubre. Aunque generalmente asociado con la celebración de «Halloween», este mes nos trae un feriado para revisar la historia. Un puente festivo que algunos prefieren conmemorar en lugar de celebrar.

Empecemos por puntualizar la fecha y lo que ella representa, al menos para la mayoría. El 12 de octubre, el descubrimiento de América. Presentado de esa forma llana pareciera no generar controversia alguna, sin embargo, nada más alejado de la realidad. Desde la misma definición comenzamos a tener problemas. Diferencias, al menos. Y divergencias bastante respetables, puntos de vista que llaman nuestra atención a una realidad más profunda. Pero, de nuevo, es necesario que vayamos despacio para ir percibiendo la evolución de esta fecha conmemorativa. Conocer sus inicios y sus objetivos primarios nos pueden dar luces para tratar de comprender mejor su actualidad. Un vistazo general, no erudito, pero tampoco absolutamente superficial. No para fijar una posición, pero sí que nos permita ser más conscientes de la realidad histórica.

Un poco de historia…

La celebración del día de la raza se gestó en siglo XX por iniciativa del presidente de la Unión Iberoamericana. Faustino Rodríguez (que así se llama el señor) consideró oportuno crear una celebración con motivo del descubrimiento de América. Su intención, al parecer, era fortalecer los lazos entre los países de habla hispana con la «madre patria». Quizás su visión particular de los hechos acaecidos en la conquista lo hacían creer en un feliz encuentro. Su enfoque era el del heroico descubrimiento y posterior labor «civilizadora» por parte de los españoles. Los nativos que encontrara en su gesta el inolvidable Colón tuvieron la suerte de ser debidamente educados por España. Así, la celebración exaltaba ampliamente las virtudes de los descubridores y civilizadores europeos que trajeron prosperidad a la rezagada América.

Por supuesto, desde el mismo principio hubo reticencia de algunos para aceptar esta versión de los hechos. Ni se diga de aceptar una celebración. Sin embargo, el paso de los años fue instalando la costumbre en la mayoría de los países americanos. Y en España, ¡como no! La incomodidad que muchos manifestaban por «celebrar» la conquista y la barbarie se vio reflejada, para comenzar, en la denominación. Algunos países (Argentina, especialmente) optaron por cambiar el nombre con el que se conocía la fecha del 12 de octubre. El hábito había impuesto «Día de la Raza», pero para la década de 1920 ya había una alternativa compitiéndole. Diplomáticos españoles lanzaron «Día de la Hispanidad», que poco a poco fue ganando terreno en la península ibérica. Allí se impuso definitivamente, en casi toda América prevaleció el original «Día de la raza».

Otros nombres, otros conceptos…

El paso del tiempo siguió trayendo otras voces y otros relatos, otras versiones de la historia fueron tomando fuerza. De este modo y, de nuevo desde la denominación, la fecha del 12 de octubre ha tomado otros caminos. Para algunos (no pocos) este día debería ser de reivindicación con los pueblos originarios de América. Así pues, un nombre alternativo que ha venido cobrando vigor es el de «Día de la resistencia indígena». Quienes así lo postulan advierten que no existe rigurosamente tal cosa como un descubrimiento. Consideran la llegada de Colón como una intromisión y una ruptura trágica en la historia y la cultura americanas. La consecuente colonización (violenta en la mayoría de los casos) la consideran una afrenta histórica que no debe ser celebrada.

Otras voces han preferido el «Día del Respeto a la Diversidad Cultural», en Argentina (otra vez ellos) es el nombre oficial. En esta versión de los hechos se trata de establecer un delicado equilibrio, difícil de encontrar, a decir verdad. Para empezar el 12 de octubre no se toma como una celebración en el sentido pleno del concepto. Se trata más bien de una conmemoración. No se puede borrar de la historia que, en esa fecha, en el año 1492 el mundo dio un vuelco. La llegada de Colón y sus carabelas al Nuevo Mundo suponía un cambio de paradigmas geográficos, históricos, culturales. El mundo (con toda razón) no volvería a ser el mismo.

Tampoco se podían plegar a la romántica idea del siglo XX que anunciaba la llegada europea como «la civilización». Al igual que aquellos que prefieren hablar de resistencia indígena, reconocen que en nuestras tierras ya existían civilizaciones. Admiten las medidas que tomó la corona española para la protección de las comunidades originarias (Leyes de Burgos, por ejemplo). No obstante, también verifican los desmanes y las desgracias que trajeron los colonizadores por cuenta de su ambición sin límites. Por eso, desde su mismo nombre, esta línea de pensamiento prefiere el rigor histórico antes que las celebraciones huecas.

Un tiempo para compartir…

La colonización y el mestizaje deben ser tomados con pinzas, la generalización nunca ha sido una buena medida. Depreciar de un tajo la riqueza cultural que propició el encuentro de dos mundos sería, cuando menos, desacertado. Suponer, como antaño querían imponer, que se trató de lo mejor que le pasó a América, constituiría una enorme candidez. Fue un choque, sin lugar a duda, un fuerte cruce que en su estela dejó cosas valiosas y aterradoras. Muchísimas bellas, como nuestro idioma y la multiculturalidad de nuestra tierra. Basta con tomar carretera y darnos cuenta de cuánto cambian las costumbres y tradiciones de ciudad en ciudad. Sin embargo, es también evidente que nos une una misma cultura, con sus matices, sus variaciones y sus mezclas diversas.

Como un hilo de oro que recorre nuestro país y nos hace una sola nación, aunque seamos diferentes, diversos. Disfruta a fondo este nuevo feriado (que hace rato que no teníamos) y explora un poco a Colombia. Quizás seas de los que piensa que el puente del 12 de octubre no es para celebrar. Acaso seas de los que espera con impaciencia ese festivo que va hasta el 14 de octubre. A lo mejor disfrutas conociendo y aprendiendo de la variedad de culturas de nuestro país. No importa cuál sea tu caso, tenemos un plan y un lugar para que goces a plenitud.

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Por: Dagoberto Garzón Q.

@Dagho82

Referencias

  1. Día de la Raza
  2. Hoy, Día de la Raza, fecha en la que Colombia conmemora su diversidad cultural

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