"La cebolla es escarchaMiguel Hernandez, Las Nanas de la Cebolla
cerrada y pobre.
Escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla,
hielo negro y escarcha
grande y redonda"
No dudaria un instante en dejar de mirara la realidad, estaba buscando y encontrando temás y problemas, la sombra de la política, el derecho y hasta la sociología; no quiero caer en la filósofia barata donde busco la redención y un altar, solo escribir. Bajo esta situación, dejando de lado el pragmatismo y queriendo llegar más a la argumentación y reflexión buscando en lo más humano, mi estomago se movio en un agrio espasmo, y allí supe lo que es y no es humano: el hambre; desde la visceralidad de la falta de alimento, como el abono a la muerte más larga entre deseos, irónias y debilidad hasta la abstracción en la mente vacia y ansiosa de conocimientos que por razones tanto variadas como cínicas se marchitan de igual manera: entrte el deseo, la irónia y la debilidad.Es un tema amplio y variopinto, pero igualmente interesante y retador. Siempre he dicho que el mundo se debe ver desde todas sus aristas, no solo de la forma lineal de gráficas y rasgadura de vestiduras, sino pensarse, repensarse y recrearse, esto, obviamente aplicado como un pequeño brochazo hacia el hambre.
¿Qué es lo primero que viene a la mente con esta palabra?, Me atrevería a decir que infantes somalies acurrucados en la arena con sus ojos vidriosos mirando hacia el lente de algun periodista europeo, pero tambien diria que esta en ese niño, niña o adolecente que va a su colegio con la ropa vieja, raida y heredada, los cuadernos sucios y arrugados mientras un nudo en su abdomen y un humor en su cabeza lo hace irse de la realidad mientras su regordeta profesora lo reprende por no prestar atención; tambien diria que esta en esa mujer que cocina lentejas y arroz, arroz y miseria perfumada de la clase media, mientras espera un milagro de su empleador. Ampliando más, está en esas pauperrimas tiendas y cadenas de supermercados que rayan la irónia entre productos importados de colores vistosos y etiquetas en inglés y viveres de precios rebajados apiñados en cajas, medio caducos y a bajo precio que llenan la barriga con materias primas de mala calidad y valor nutricional bajo: todo bajo los mismos dueños. Con esto quiero llegar al punto que no se tiene que ir muy lejos para dimencionar este concepto, así las cosas, en cada uno hay un famelico en potencia, solo algo tan aparentemente abundante como la comida se debe suprimir para liberarlo, ya sea por motivos estéticos, económicos o hasta ideológicos, el inhibir una necesidad humana se tomaría como un esfuerzo, como una expiación casi católica en busqueda de una perfección inexsistente o en espera de una realidad renuente a mejorar. Alli esta su sentido humano, en que esta es una de las pocas cosas que representa una igualdad real entre unos y otros, ricos y pobres sucumben frente a un plato de algun bipedo sacrificado, hervido condimentado y rudimentariamente decorado despues d euna larga jornada de trabajo, como mostrando poder y a la vez debilidad del ser humano frente a otra especie que fuera de su voluntad, le dará más vida al hominido superior.
Ya viendolo inmaterialmente, estaria el hambre intelectual, el no saciar la mente humana tan curiosa y dormirla como durmen los niños africanos para mitigar su hambruna. Es ser ciego por voluntad propia y trascegar por la vida en un cuenta gotas de falacias y vanalidades, discursos infantiles y esperanzas infundadas. Tomando "La Filosofia Del Hambre" un breve ensayo en forma de carta a un joven docente, el autor toma el precepto del titulo y lo desarrolla reiterativamente en el contexto colombiano, de el, rescataria el conformismo y la ironía de la mano de un país que no cree en si mismo, de un sistema educativo que es "(...)nicho de la filósofia del hambre.", de talentos desperdiciados, de conformismo y mediocridad. Con esas 14 páginas el define el "hambre inmaterial" con mayor estilo y mejores argumentos que yo; aun así, deberia agregar y ahondar que el hambre, ademas de ser humano e igualitario, es tambien individual, y permanecer o salir de ella va en cada uno. Pensar en soluciones grupales es practico y medianamente eficaz, pero no del todo eficiente; tomemos como ejemplo un aula universitaria, si se ponen 35 personas en ella, y un profesor de cualquier materia, de 35, algunso pasaran, otros se quedara, y otros se retiraran de la amteria, de 0 a 5 se rotularan y sera inmedible el aprendizaje o el interes de cada uno, en cada mente se aprende o desprende un conocimeinto de manera ditinta, mucho mewnos su grado de interes en la materia o si aplicaran lo "aprendido" en clase. Cada uno es un mundo que segun multiples factores desechara o añorara ese espacio y sus vivencias, unos pocos seran más profesionales y otros estaran en la inercia y el hambre, la cual no se calma con un numero que solo alimenta egos y trasnochadas, se alimentaria realmente con una buena educacion , y sobretodo: con un esfuerzo individual que en suma generaría un bien común, se solucionaria el hambre si en cada mundo se conquistara a sí mismo, y de verdad cumplir el postulado que el hombre es un fin pero no un medio.
Esa es el hambre,invertir la premisa y ser un medio para otros,es sentir como tu sangre circula más lento, tu cabeza divaga, tu boca se llena de saliva espesa como el petroleo q sale de la misma tierra que pisas, es que tu cuerpo se consuma a si mismo bajo las ropas de lino, hambre es que el mundo vea eso y se limite a tomar una foto y cantar canciones melosas acerca de ello.
