Para todo el mundo, en especial hispanoamérica  que ha estado de frente a la ventana de la cortina de arena que es el régimen chavista: su ascenso, sacralización e infructuosa oposición recuerdan las viejas épocas de la guerra fría  la política de la vieja escuela con un líder culebrero y un séquito que en una marea roja por las calles alaban en un culto entre pagano y dictatorial a su convaleciente cabeza (cabeza que hasta donde se esta calva). Tantos siglos de evolución y cambios en la política, la separación de poderes, la separación entre poder político y poder religioso hasta el intento de pulir y engendrar la actual democracia están volviendo por  el camino  que labro con una gorra tricolor y estrellada.
Ver a un Estado, miembro de la OPEP y fabrica de reinas y telenovelas de bajo cilindraje centrada se centre en torno a  una prenda  de vestir que en el fondo todos sabemos esta hecha en china, sera usada por venezolanos y cubanos y pasara a la frontera colombo-venezolana de maneras en las que no quiero.
En el caso de la gorra venezolana, lo primero seria afirmar que es inútil que un Estado se centre en un símbolo; aunque  no sorprenda, es el culmen del fetichismo ideológico que atraviesa un país donde la cabeza del ejecutivo se vuelve un leviatan (sobra decir que hobbesiano).
Esto demuestra una teoría política e institucional hueca, es como si las ciencias políticas y el derecho, en medio de su constante y necesario cambio se estancaran en una prenda de vestir, que a modo del gorro frigio(protagonista de muchos símbolos patrios , incluyendo el colombiano, ambos son símbolos y como tales tienen infinidad de significados. Nada mas orgasmeante para "los testigos de Chávez de los últimos días"  que su cachuca colorida pasará a ser, a futuro, parte de escudos y monedas de otras naciones que se inspirarían en sus ideales. Y si eso sucede, al igual que el mencionado gorro frigio sera mal copiado y mal interpretado.
Mirando a fondo, muestra también al debilidad de un Estado al desviar la atención a una simple prenda, como si esta estuviera hecha con trocitos del tumor cancerígeno de Chávez, así también es obvia la copia cínica de la gorra de Henrique Capriles, al misma que su durante su campaña presidencia, en un intento de estandarizar a los chavistas solo muestra la falta de creatividad de algún funcionario ocioso que quiere ver en sus "hermanos bolivarianos" una fuente fija de ingresos(porque no seria coincidencia que la dichosa gorra solo la venda el gobierno)y un puñado ingenuos. Con todo esto, de manera indirecta, ratifica y mejora en cierta forma la imagen de la oposición.
Para finalizar, no debería existir tremendo debate frente a una nimiedad, en comparación con los problemas reales de una nación, no debería haber escrito esto, ni haber visto tantas noticias alusivas a este tema que solo lo agrandan y le dan una importancia que no merecen,pero, como en el derecho, la política y la vida misma, un detalle, lo puede significar todo.