Recién terminado el Preu (posteriormente COU; hoy 2º de bachillerato), tras doce o trece años en colegios de frailes y curas donde no aprendíamos absolutamente nada del mundo circundante, es decir, de lo que significaba vivir en una dictadura o estar sometido moralmente a la que ya Isabel de Castilla denominaba la religión verdadera, tuve la suerte de matricularme en Filosofía y Letras de la