El refrán, Más Vale rostro bermejo que corazón negro, con el cual manifestamos que más vale desahogar el corazón manifestando los afectos que lo atormentan, que no devorarlos en silencio, no difiere del siguiente que se lee en la Colección de Zaragoza, y que fácilmente pudiera confundirse con el anterior: —Más vale vergüenza en cara, que dolor en corazón. La vergüenza, puesta en su punto, es