En el ámbito educativo estamos plagados de ideas “brillantes” de gente “brillante”. Bueno, más bien de ideas, producto de una noche de gin tonic y algunas inspiraciones de un producto que, ya os digo yo sabiendo la distancia que tiene esa gente “brillante” de las aulas, no es tiza.

Se legisla a nivel educativo por encima de nuestras posibilidades. Y, curiosamente, cada vez son más los despropósitos que se añaden a cada nueva ley. Eso sí, la calidad educativa que va a recibir nuestro alumnado siempre sujeta a las decisiones de demasiados tipos y tipas que llevan su cuerpo cargado de cazalla o, simplemente, obedecen las órdenes de quienes todos sabemos. Porque, aunque no os lo creáis, el modelo de paradigma educativo que llega a nuestro país no es nada más que unas instrucciones, muy bien perfiladas, de algunos que tienen intereses muy poco educativos.

Ayer me llega una carta, remitida a los centros educativos, en los que mi Conselleria dice que ha publicado una página web donde los docentes podemos consultar la última normativa y entenderla. Lo sé. Si tienen que hacer una página así es porque la normativa es infumable e ininteligible.

La página es noucurriculum.es y, en la misma, distribuida por etapas, se hallan modelos de trabajo, situaciones de aprendizaje, desarrollo de los diferentes proyectos de investigación que aparecen en todos los cursos de la ESO, etc. Algo que, en principio, parecería muy interesante pero…

Sí, digo pero, porque se introducen algunas cosillas, de las cuales solo voy a mencionar un par de ellas (da para mucho juego, pero he empezado tarde con el post de hoy).

La primera relacionada con el DUA. La carta recibida dice textualmente lo siguiente:

En la etapa de educación primaria se incorporan nuevos elementos, la finalidad de los cuales es la adquisición de competencias específicas, mediante la movilización de saberes básicos, a partir del planteamiento de situaciones de aprendizaje significativas y relevantes, tanto para el alumnado como para el personal docente. Las medidas organizativas, metodológicas y curriculares que se adoptan con este objetivo se han de regir por los principios del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA).

Sí, las pseudociencias entran por la puerta grande en el ámbito educativo. Estilos de aprendizaje, eliminación de profesionales de Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje para integrarlos dentro del aula para “que hagan matemáticas o lengua a una parte de ese alumnado”. Nada. Es lo que tiene, como he dicho siempre, no contar con personas que saben para legislar. Y eso es un gran problema.

Además de la imposición de una determinada manera de dar clase en Primaria, también aparece otra cuestión que, como avanzadilla del Decreto de Especialidades de Secundaria, cuyo borrador indica que desaparece la asignación especialidad a asignatura a impartir, mediante el agrupamiento en tres ámbitos en todos los cursos de la ESO (científico-tecnológico, humanístico-social y de artes, música y deportes), que permitirá que un profesor de Música dé, desde Música, pasando por Educación Visual y Plástica, hasta Educación Física. Pero no hablemos de borradores que se filtran o dimes y diretes que se van comentando en determinados lugares. Hablemos de cambios importantes en el nuevo currículum valenciano para el curso que viene.

Para muestra, tan solo el programa de diversificación curricular (PDC) en tercero y cuarto.

Hasta ahora, en esos grupos, era normal que el profesorado impartiera en bloque el ámbito lingüístico y social y el científico. Ahora se añade el ámbito práctico. Por tanto, la misma persona podrá impartir, al ser el ámbito práctico incluido también en el científico (porque, hasta ahora un profesor de Tecnología podía dar ese ámbito), Matemáticas, Biología y Geología, Física y Química, Tecnología y Digitalización y, agárrense los machos, Orientación e Iniciación Profesional. Algo que implica que cualquier profesional que tenga atribuida cualquiera de esas asignaturas por especialidad, podrá impartir las otras.

Por tanto, el curso que viene nos podemos encontrar profesores de Matemáticas, Biología, Física y Química, Tecnología, Orientación Educativa, Economía o FOL que impartan todo el bloque. Pero bueno, qué más da. Son alumnado de segunda para algunos. Especialmente para los que legislan.

Tampoco pasa nada con este currículo. Total, ya hemos hecho un concurso de méritos que va a permitir que (¡caso real!) un interino de Tecnología Sea Funcionario de carrera de la especialidad de Música y que (¡también caso real!) un interino de Geografía e Historia sea funcionario de Organización y Gestión Comercial. Nada. Ya no quedan manos para aguantar tanto cubata.

Tachando días para jubilarme. Y eso que, por desgracia, todavía me queda.

Como estoy haciendo en los últimos artículos, os recomiendo mi nuevo libro sobre educación para mayores de dieciocho, “Educación 6.9: fábrica de gurús”. Lo podéis adquirir aquí (en versión digital o papel). Y sí, me haría mucha ilusión que fuera uno de los diez libros más vendidos sobre educación este curso. Además, adquiriéndolo ayudáis a mantener este blog.