Cuando C.P. Snow pronunció su famosa conferencia sobre lasdiferenciadas de las ciencias y las humanidades hace medio siglo, los titulados en carreras de letras se limitaban a ingnorarnos. En la actualidad, los científicos y los médicos se ven superados en número y en potencia de fuego por nutridos ejércitos de individuos que se sienten autorizados a emitir juicios sobre asuntos que son una simple cuestión de evidencia (hasta aquí, admirable aspiración la suya), pero sin preocuparse siquiera por adquirer un nivel básico de compresión de las materias por tratar
Mala Ciencia
Ben Goldarace