Si apenas comienzas a usar los Sartenes de cerámica y seguro habrás notado que al poco tiempo la comida comienza a quedarse pegada.
Y es que la realidad es que aún y cuando los utilices “correctamente”, los sartenes de cerámica eventualmente comenzarán a perder su capacidad antiadherente rápidamente.
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Sin embargo, hay un truquillo para mantener esta adherencia en mejor condición y por más tiempo.
¿Cuál es el truco? Curar los sartenes de cerámica regularmente.
Así de simple.
En este artículo que compartiré todo lo que necesitas saber sobre cómo curar sartenes de cerámica para extender su vida útil por mucho más tiempo.
Vamos al detalle.
¿Por qué curar un sartén de cerámica?
Si habías escuchado algo relacionado con esto del “curado de sartenes“, seguramente lo asocias a los sartenes de hierro fundido.
Y si, el curado de sartenes es una práctica que se emplea habitualmente para evitar que los sartenes de hierro fundido se oxiden y para aumentar su capacidad antiadherente.
Los sartenes de cerámica, al estar recubiertos con una capa de silica, son sartenes que no se corroen y que son super antiadherentes.
¿Entonces para qué curarlos?
Bueno, pues con el curado de los sartenes de cerámica no solo mantienes por mucho más tiempo su capa antiadherente agregando una adicional de protección, sino que también facilitas muchísimo su limpieza posterior.
Todo esto traduce en una mejor experiencia de uso en la cocina y en extender considerablemente su tiempo de vida.
Como curar sartenes de Cerámica – Paso a Paso
De entrada, prepárate con los siguientes materiales para realizar el curado de tu sartén de cerámica:
- Jabón
- Agua
- Toalla de papel o un paño de tela
- Aceite vegetal (preferentemente aceite de canola o de maíz)
Paso 1: Lava
Si tu sartén es nuevo, lávalo con agua caliente y jabonosa para remover la capa protectora con la que vienen de fábrica.
Procura usar una esponja que no sea abrasiva para evitar rayar la superficie antiadherente.
Después, sécalo completamente.
Paso 2: Recubre
Extiende una capa ligera de aceite vegetal, cubriendo toda la superficie interior del sartén completamente.
Te recomiendo utilizar el aceite de canola o maíz, porque estos tienen un alto punto de humo, y esto les ayuda a que el aceite no se descomponga y comience a humear a baja temperatura.
Una vez cubierto, emplea una brocha o una toalla de papel para eliminar el exceso, lo ideal es dejar una capa ligera y uniforme.
Paso 3: Calienta
Con los sartenes con cerámica, es importante NO usar altas temperaturas. No es necesario.
Por lo que para comenzar con el curado, lo recomendable es calentar el sartén a temperatura media.
Puedes curarlo de dos formas:
- Al fuego de la estufa
- En el horno
De colocarlo en la estufa, recuerda moverlo de vez en cuando para asegurar que todas las áreas del sartén son calentadas correctamente. Evita que se acumule aceite en algún punto del sartén, de hacerlo, procura distribuirlo moviendo el sartén continuamente.
Si quieres utilizar el horno, caliéntalo a unos 120 – 150 °C / 250 – 300 °F y coloca el sartén boca abajo.
Paso 4: Espera
Deja calentar por alrededor de unos 20 minutos para permitir que el aceite sea absorbido por la superficie del sartén, o hasta que notes que el aceite se ha consumido.
Paso 5: Enfría
Retira del fuego y espera hasta que el sartén regrese a temperatura ambiente.
No lo mojes o apliques frío para enfriarlo rápido. Dale su tiempo. Someterlo a cualquier tipo de cambio brusco de temperatura solo dañará el recubrimiento del sartén.
Paso 6: Repite
Retira el aceite quemado con una toalla y vuelve a repetir los pasos del 2 al 5, de ser necesario, hasta que notes que aparece una capa homogénea y brillante en la superficie de la sartén.
¿Qué tan frecuentemente curar los sartenes de cerámica?
Idealmente, este proceso de curado lo debes repetir por lo menos cada 6 meses. Antes quizás, si usas a diario tu sartén de cerámica.
Sin embargo, usa tu sentido común:
Cuando notes que la comida comienza a quedarse pegada y no ves daño aparente en el sartén, entonces cúralo.
Llegará un momento en donde verás que incluso después de curarlo, la adherencia no mejora. Entonces será ahí cuando tendrás que echarlo fuera y hacer de un nuevo sartén.
Tips para que tus sartenes de cerámica duren por más tiempo
Si bien curar tu sartén de cerámica es una de las mejores maneras de mantener tu sartén como nuevo, hay otras maneras que conviene tomar en cuenta para cuidar de tus sartenes correctamente.
Evita los utensilios metálicos
Aunque veas que algunas marcas de sartenes de cerámica los promueven como “seguros” para usar utensilios metálicos, lo mejor es no hacerlo.
Ármate de un buen set de utensilios de madera o silicona y olvídate de cualquier lío.
Cualquier mínimo tallón de la superficie hará que pierda su calidad antiadherente, por lo tanto, lo más seguro es utilizar utensilios que nos ayuden a incrementar la vida útil de los sartenes de cerámica.
No mucho que discutir, verdad?
Utiliza aceites con alto punto de humo
Usando aceites de alto punto de humo, como el de canola o el de maíz, evitas que se queme fácilmente en el sartén y dañe la capa antiadherente, formando esa mancha cafesosa.
Evita también usar aceites en aerosol, ya que estos contienen químicos que tienden a acumularse en la superficie del sartén, restándole sus propiedades antiadherentes.
Evita sobrecalentar los sartenes de cerámica
Exponer los sartenes de cerámica a altas temperaturas puede ocasionar daños considerables en la superficie, como decoloraciones o bien, pueden comenzar a aparecer pequeñísimas quebraduras en la superficie. Algunas veces, estos daños son irreversibles.
Los sartenes de cerámica están fabricados por lo general con una base de aluminio, lo que hace que tenga una excelente distribución del calor.
No necesitas de altas temperaturas para cocinar. Lo ideal es usarlos a temperatura baja o media.
Siempre dejando precalentar un poco el sartén, antes de agregar aceite. Después dar tiempo al aceite de calentarse, antes de agregar la comida al sartén.
Guarda correctamente tus sartenes de cerámica
Evita apilar tus sartenes unos sobre otros. Esto puede generar rayones y echar a perder tus sartenes.
De hacerlo, coloca paños o cartones para evitar el contacto entre ellos.
Alternativamente, puedes guardarlos en racks para sartenes, como estos.
O bien colgarlos en alguna pared. Con esta opción puedes matar dos pájaros de un tiro: cuidar de tus sartenes correctamente y usarlos como decoración en la cocina.
¿Cómo limpiar los sartenes de cerámica adecuadamente?
Evita a toda costa el lavavajillas, aún y cuando el fabricante mencione que el sartén de cerámica es apto para lavavajillas.
El proceso del lavavajillas puede ser bastante rudo para estos sartenes por varias razones.
Primero, el jabón que se utiliza tiende a ser más fuerte, ya que contiene químicos para remover más fácilmente la comida.
Segundo, el uso de agua caliente y luego fría, genera pequeños choques térmicos y a la larga termina dañando la superficie del sartén.
Y finalmente, dentro del lavavajillas pueden resultar rayones al estar en contacto con cualquier otro objeto.
Por estas razones, lo mejor es lavarlos a mano. Incluso, usar solamente agua y retirar el exceso con una toalla o paño húmedo.
De requerirlo, emplea un poco de jabón y una esponja suave, y nada más.
Cerrando
Con el cuidado y el uso adecuados, y el curado de tus sartenes de cerámica periódico, puedes mantener sus sartenes de cerámica en perfecto estado durante muchos años.
Es un proceso simple, pero efectivo.
Así que, no lo olvides y dales este pequeño mantenimiento a tus sartenes regularmente.
