Como notamos los 10 principales productos de agroexportación en el 2022 fueron:

1. Uvas (US$ 1 378 millones de dólares)

Indicar que este tipo de productos se exportan bajo el sistema ya conocido de exportación final. Es decir si el valor FOB supera los USD 5.000, el exportador deberá recurrir a una agencia de aduanas para que ejecute los trámites de exportación. Los documentos solicitados por la aduana para estos casos son: facturas comerciales, listas de empaque, documentos de transporte, pólizas de seguros pertinentes, certificados de cuarentena vegetal en caso de requerirse, mas documentos complementarios que pueda exigir la aduana por temas de seguridad.

Asimismo, los exportadores tienen la facultad de acogerse a beneficios fiscales como créditos fiscales y créditos a favor del exportador. Por tanto para poder exportar los productos deben de cumplirse con los protocolos fitosanitarios de exportación del SENASA. Además de emitir una licencia de exportación, las empresas exportadoras también deben someterse a un proceso de empaque en función a los procedimientos de logística de exportación de productos perecederos.

Es difícil determinar la contribución de las montañas y las selvas a las exportaciones agrícolas del país, aunque las estimaciones más positivas la sitúan en 1.500 millones de dólares al año. El objetivo es ampliar este número y para ello estamos trabajando en varios proyectos de colaboración de productos en ambas zonas geográficas, que tienen como objetivo conseguir que estos pequeños y medianos productores alejados de la costa puedan formar parte de la agricultura. cadena exportadora.

Aunque es difícil de cuantificar, las estimaciones más optimistas sitúan la contribución de las montañas y los bosques a las exportaciones agrícolas del país en 1.150 millones de dólares anuales.

Es difícil cuantificar la contribución de las montañas y los bosques a las exportaciones agrícolas del país, pero las estimaciones más optimistas la sitúan en 1.150 millones de dólares anuales.

La contribución de las montañas y los bosques a las exportaciones agrícolas del país es difícil de cuantificar, pero las estimaciones más optimistas la sitúan en 1.150 millones de dólares anuales.

Aunque es difícil de cuantificar, las estimaciones más optimistas sitúan la contribución de las montañas y los bosques a las exportaciones agrícolas del país en 1.150 millones de dólares anuales.

La quinoa ecológica, el café de especialidad, la pasta de cacao, el aceite de castaña, la harina de tawi… todos tienen algo en común: se producen en las selvas o montañas del país y se exportan a diversos mercados del mundo. Sin embargo, algunos funcionan como materia prima, y ​​en los últimos años se han realizado esfuerzos para mejorar las propiedades de estos productos y aumentar su valor. Sierra y Selva Exportadora está involucrada en este esfuerzo. También se insistió en que la producción de la montaña debería conectarse con la producción de la costa, como ocurre hoy con los aguacates. José Ezeta Carpio, director general de Sierra y Selva Exportadora, confirmó que como organización desarrollan planes de negocios con 25 cadenas de cultivos, 15 de las cuales están ubicadas en la montaña y se enfocan en el cultivo de quinua y aguacate; es decir corresponden a la selva donde trabajan. Trabaja con cultivos como castaña, aguamanto y camu camu.

La quinua es uno de los “superalimentos” que el Perú promociona en el mundo y su marca industrial es “Superfoods Perú”. El consumo mundial está aumentando, especialmente en los países desarrollados, algunos de los cuales también lo crecen. De hecho, Perú ha liderado las exportaciones de quinua durante los últimos cinco años, produciendo alrededor de 46.000 toneladas, siendo Estados Unidos y Europa los principales mercados de destino

Si bien hasta hace unos años Sierra y Selva Exportadora contó con un Programa de Berries, dedicándole esfuerzos e inversión al arándano, hoy este no es un producto que ahora forme parte la canasta prioritaria. “En todo caso, estamos concentrados en el aguaymanto y el camu camu. También se está trabajando mucho el tema de los berries nativos”, precisa el timonel de Sierra y Selva Exportadora. El arándano no es un producto que en la sierra pueda generar aún entusiasmo, hasta que veamos cómo van los niveles de productividad y qué modelo de campo se necesita. A diferencia de la costa alta, no tienes zonas planas que te faciliten la intervención de la tecnología agrícola en la sierra”, precisa.

Ezeta sostiene que además de la quinua y la palta, hay una serie de cultivos que asoman con potencial productivo y comercial. Menciona a la maca, tarwi, maíz morado, maíz blanco del Cusco y tara. “En especial, el tarwi es un producto que tiene una demanda importante. En Áncash estamos desarrollando un plan de negocios y queremos medir sus potencialidades, además de ver si se puede expandir geográficamente. A este producto hay que eliminarle su amargor tras remojarlo en agua. En todo caso, hay que llevarlo a procesos de valor agregado, básicamente, producir la harina”, explica y cuenta que la agencia de cooperación italiana les ha ayudado con el equipamiento para que un grupo de productores pueda desarrollar este producto.