Hay muchas razones por las que una mujer tiene un deseo Sexual alto o bajo y por las que fluctúa a lo largo de su vida. Las causas pueden ser la edad, las enfermedades crónicas, los medicamentos, el estrés, un estilo de vida inadecuado y los problemas de pareja.

A algunas Mujeres no les importa el declive sexual o incluso la reticencia a mantener relaciones sexuales y pueden prescindir de ellas. Si la situación no afecta a la vida de la pareja de la mujer ni le causa ningún otro perjuicio, entonces no hay nada que resolver.

Pero si una mujer se percibe a sí misma como sexualmente disfuncional y está preocupada por las dificultades que surgen, es necesario tomar medidas e intentar eliminar las causas.

Antes de ponerse en manos de profesionales, hay métodos para ayudarse a sí misma. Éstos son algunos:

• Medidas de régimen
• Afrodisíacos naturales
• Comunicación con la pareja
• Romper la rutina sexual
• Educación sexual

Medidas de régimen

Lo más fácil que puede hacer una mujer por sí misma es intentar cambiar sus hábitos alimenticios. Incorporar más frutas, verduras, dar preferencia a los alimentos frescos frente a los procesados, seguir un régimen de bebidas (la falta de líquidos no sólo puede dar dolor de cabeza, los riñones sufrirán, sino que la capacidad de lubricación natural también será peor).

Empezar a moverse, tomar aire fresco, reducir significativamente o eliminar el alcohol y los productos del tabaco, dormir de 7 a 9 horas al día (según las necesidades individuales, pero lo suficiente), mantener el estrés al mínimo. Estas mismas medidas pueden ayudar a los hombres que quieren eliminar las causas de la disfunción eréctil. Si la mujer está tomando anticonceptivos hormonales y otros medicamentos, debería consultar a un médico para ver si se pueden sustituir por otros medicamentos sin posibles efectos secundarios.

Sabía que:

¿El uso excesivo de aparatos electrónicos a la hora de acostarse reduce la calidad del sueño? Si no puede prescindir de la información antes de dormirse, siempre es mejor echar mano de un libro o escuchar música relajante.

Afrodisíacos naturales

Desde hace tiempo se sabe que muchos alimentos aumentan el interés por el sexo cuando se consumen regularmente. Los más populares de este tipo son los mariscos, los plátanos, los higos, los aguacates, la sandía, las uvas rojas y el chocolate negro. Algunos contienen sustancias que favorecen la producción natural de hormonas, otros relajan los vasos sanguíneos, ayudando a mejorar la circulación de la sangre a las partes pudendas y a aumentar su sensibilidad. Algunos incluso evocan pensamientos sexuales: ¿acaso una fresa, un plátano o un espárrago nunca le ha dado ideas divertidas?

Al armar una dieta, no hay que olvidarse de las hierbas. El azafrán, el jengibre, el hinojo, la salvia, la saturnina, la pimienta de cayena, el cilantro, la cúrcuma y el cardamomo ayudan a aumentar el apetito sexual.

Consejos para usted:

¿Qué le parecería una cena caliente y aromática en forma de Tikka-masala? ¿No lo conoce? Busque algunas recetas y verá por los ingredientes por qué merece la pena incluirlo en su dieta.

Algunas hierbas son maravillas naturales, especialmente la damiana (Turnera diffusa), la maca peruana (Lepidium meyenii) y el cardo (tribulus terrestris). Vale la pena conocerlos mejor.

Damiana

El uso de esta planta originaria de América Central y del Sur como afrodisíaco y relajante se conoce desde la época de los aztecas y los mayas. Los compuestos flavonoides presentes en las hojas mejoran la circulación sanguínea y aumentan la sensibilidad de los órganos genitales femeninos.

Puede utilizarse sola o en combinación con otras hierbas. Por ejemplo, se lleva bien con el ginkgo biloba. Consigue excelentes resultados especialmente en mujeres posmenopáusicas.

Maca peruana

Esta hierba, también conocida como «Viagra peruano», es un superalimento que contiene aminoácidos esenciales, vitaminas B1, B2, B6, C, D, E, oligoelementos y minerales como el potasio, el manganeso, el calcio, el zinc, el hierro y otras sustancias activas.

Proporciona energía, refuerza la inmunidad, mejora la forma física, reduce el estrés y la ansiedad, refuerza la memoria, la concentración y el pensamiento, y tiene fuertes efectos afrodisíacos en mujeres y hombres. Puede utilizarse sola, pero funciona aún mejor en combinación con el cardo.

Cardo

Las investigaciones han demostrado que el cardo aumenta significativamente el deseo en las mujeres, favorece la excitación sexual, la lubricación, la facilidad para alcanzar el orgasmo y reduce el dolor durante el coito.

Estabiliza el nivel de las hormonas sexuales femeninas, estimula la producción de las importantes hormonas femeninas estradiol, hormona foliculoestimulante y hormona luteinizante, mejorando así la salud reproductiva de las mujeres.

Puede aliviar las molestias asociadas a la menopausia. Reduce la sensación de fatiga y favorece significativamente el deseo sexual. Funciona bien con la maca peruana, con la que actúa de forma sinérgica; en combinación, consigue efectos aún mejores.

Consejos para usted:

Un excelente ayudante para aumentar el deseo sexual y mejorar la experiencia del sexo es también la L-arginina, un aminoácido esencial que ayuda significativamente a relajar los vasos sanguíneos, la circulación de la sangre y mejora la sensibilidad de la vagina y el clítoris. Puede encontrarse en alimentos ricos en proteínas (carne, lácteos, lentejas, guisantes, semillas de calabaza, cacahuetes).

Y la Arginina es una excelente opción no sólo para las mujeres, sino también para los hombres. Suele ser parte de los preparados para la erección. Para saber más sobre qué afrodisíacos son adecuados para los hombres, consulte el artículo 

Comunicación con la pareja

El deseo de tener relaciones sexuales y la profundidad de la experiencia dependen no sólo de la salud de la mujer, sino también de su bienestar psicológico, que en gran medida depende de su satisfacción con su pareja. Donde no hay paz, no hay deseo sexual. Por lo tanto, si es posible, aunque sea un poco, hay que trabajar en ello. Resolver problemas y dudas, pasar tiempo juntos activamente (no pasivamente al lado del otro, sino realmente juntos).

Si una mujer tiene problemas de salud, su pareja debe apoyarla siempre. La confianza, la comprensión y la sensación de seguridad son esenciales para la mujer. Puede leer más sobre la importancia de la comunicación abierta para ambos miembros de la pareja en el artículo

Romper la rutina sexual

Incluso las mujeres perfectamente sanas y que tienen una relación que funciona, pueden experimentar a veces períodos en los que pierden el apetito sexual o no disfrutan del sexo tanto como podrían. El culpable puede ser la rutina. Si el sexo es siempre igual, con el tiempo puede volverse aburrido  y el aburrimiento mata al apetito.

La solución es llevar algo de frescura al dormitorio. Crear una atmósfera con luces, música agradable, aromaterapia, baños conjuntos, masajes eróticos. Tratar de salirse de las prácticas sexuales acostumbradas y probar algo nuevo que atraiga a uno y otro y con lo que ambos estén de acuerdo (utilizar nuevos juguetes eróticos, sexo anal, juegos de rol, BDSM ligero).

Educación sexual

Todavía hay muchas mujeres que por diversas razones (educación, religión, normas impuestas culturalmente) no conocen bien su propia anatomía desde el punto de vista sexual; no saben cómo complacerse a sí mismas, qué Les Hace Sentir bien. No están acostumbrados a tocarse y a explorar las reacciones de su cuerpo.

Para estas mujeres, la clave de una vida sexual más satisfactoria puede ser el autoconocimiento, encontrar sus puntos sensibles y aprender a estimularlos (con un espejo, algo de lubricante y un vibrador). Y si enseñan a su pareja lo que les hace sentir bien, mejor aún.

Consejo para una mejor estimulación: Existen geles lubricantes refrescantes o calientes, cremas para aumentar la sensibilidad del clítoris y/o de las partes internas de la vagina. Otra forma de apoyar la circulación sanguínea en los genitales y aumentar su sensibilidad es el llamado “Viagra femenino»

Los caminos hacia una vida sexual más satisfactoria son diferentes. Pero las mujeres tienen algo en común: la mejora no llega por sí sola, es necesario averiguar la causa de la afección y trabajar para eliminarla o al menos mitigar sus efectos. Si los remedios anteriores no ayudan, puede ser momento de acudir al médico (médico general, ginecólogo, sexólogo, psicoterapeuta). 

Ser feliz con tu vida sexual significa ser más feliz en general y disfrutar más de la vida. Entonces, ¿por qué privarse de una vida más feliz?