Cuando enfrentamos una situación difícil, nuestra mente tiene diferentes formas de lidiar con ella. Uno de los mecanismos de Afrontamiento más comunes es la negación. La negación se define como la acción de rechazar o negar la realidad de una situación o experiencia.

Aunque puede ser una estrategia temporal para aliviar el dolor, si se utiliza en exceso, puede tener consecuencias negativas en nuestra salud mental y emocional. En este artículo, exploraremos qué es la negación, cómo puede afectar a nuestra vida y cómo podemos identificarla y superarla.

¿Qué es la negación?

La negación es un mecanismo de afrontamiento que se utiliza para lidiar con una situación dolorosa o estresante. Puede ser una forma de protegernos del dolor emocional al evitar pensar en la situación o rechazar la realidad de lo que está sucediendo.

Por ejemplo, una persona que recibe un diagnóstico de cáncer puede negar la realidad de la situación y rechazar el tratamiento médico necesario. O alguien que acaba de perder a un ser querido puede negarse a aceptar la muerte de esa persona y seguir comportándose como si nada hubiera pasado.

¿Cómo puede afectar la negación a nuestra vida?

Si bien la negación puede ser una forma temporal de protección contra el dolor emocional, también puede tener consecuencias negativas si se usa en exceso. Aquí hay algunos ejemplos de cómo la negación puede afectar nuestra vida:

• Puede impedir el progreso y el crecimiento personal: cuando negamos la realidad de una situación, nos negamos la oportunidad de aprender y crecer a partir de ella. Si nos negamos a reconocer nuestros errores o debilidades, nunca podremos mejorar y avanzar en la vida.
• Puede crear conflictos en nuestras relaciones: cuando negamos la realidad de una situación, también podemos negar las necesidades y los sentimientos de los demás. Esto puede llevar a malentendidos y conflictos en nuestras relaciones personales y profesionales.
• Puede aumentar el estrés y la ansiedad: cuando negamos la realidad de una situación, a menudo lo hacemos mediante la supresión de emociones. Sin embargo, esto no significa que esas emociones desaparezcan, sino que se acumulan y aumentan nuestro estrés y ansiedad.
• Puede empeorar la situación: la negación no cambia la realidad de una situación, sino que la empeora. Por ejemplo, negarse a buscar tratamiento médico para una enfermedad puede empeorar la salud a largo plazo.

¿Cómo podemos identificar la negación?

Identificar la negación en nosotros mismos puede ser difícil, ya que a menudo se presenta como una forma inconsciente de protegernos del dolor emocional. Sin embargo, aquí hay algunos signos que pueden indicar que estamos utilizando la negación como mecanismo de afrontamiento:

• Negación de la realidad: rechazo o minimización de la realidad de una situación, evitando hablar o pensar en ella.
• Supresión emocional: reprimir emociones y sentimientos en lugar de abordarlos y procesarlos.
• Cambio de tema: cambiar rápidamente de tema cuando se menciona la situación dolorosa.
• Comportamiento evasivo: evitando situaciones que puedan recordar la situación dolorosa, como evitar lugares o personas asociadas con ella.
• Confrontación defensiva: defenderse con agresividad o negando la realidad cuando se les confronta con la situación dolorosa.

Si nota alguno de estos signos en sí mismo o en alguien cercano a usted, puede ser un indicador de que la negación se está utilizando como mecanismo de afrontamiento.

¿Cómo podemos superar la negación?

Superar la negación puede ser un proceso difícil, pero es importante para nuestra salud mental y emocional. Aquí hay algunos pasos que podemos seguir para superar la negación:

1. Reconocer la realidad de la situación: el primer paso para superar la negación es reconocer la realidad de la situación y aceptar que está sucediendo. Esto puede ser difícil, pero es esencial para poder abordar la situación de manera efectiva.
2. Permitirse sentir emociones: en lugar de reprimir las emociones y sentimientos, es importante permitirse sentirlos y procesarlos. Esto puede ayudarnos a avanzar y procesar la situación de manera saludable.
3. Buscar apoyo: buscar apoyo en amigos, familiares o un profesional de la salud mental puede ser beneficioso para superar la negación. Puede proporcionar una perspectiva externa y ayudarnos a procesar nuestras emociones y pensamientos de manera saludable.
4. Tomar medidas: en lugar de evitar la situación, es importante tomar medidas para abordarla de manera efectiva. Esto puede significar buscar tratamiento médico, hablar con alguien sobre la situación o tomar medidas para resolver el problema.
5. Ser amable con uno mismo: superar la negación puede ser un proceso difícil y doloroso. Es importante ser amable y compasivo con uno mismo durante este proceso y recordar que es un paso importante para nuestra salud emocional y mental.

¿Cuándo es necesario buscar ayuda profesional?

Si bien la negación puede ser un mecanismo de afrontamiento común, si se usa en exceso, puede tener consecuencias negativas en nuestra salud emocional y mental. Si está luchando con la negación y siente que no puede superarla por su cuenta, buscar ayuda profesional puede ser beneficioso. Un profesional de la salud mental puede proporcionar un ambiente seguro y de apoyo para procesar la situación y desarrollar estrategias de afrontamiento saludables.

“Las viejas decisiones, una vez tomadas, desaparecen de la conciencia y se convierten en patrones automáticos de reacción en situaciones futuras.” (Jean Illsley Clarke y Connie Dawson).

● “Sí, el trabajo me impide pasar más tiempo con mi familia, pero eso no significa que trabaje compulsivamente. Simplemente amo lo que hago y ahora me necesitan más que nunca».

● “He sorprendido a mi hijo fumando tres veces hasta ahora, pero no es como si lo hablara en serio. También experimenta de vez en cuando».

● «Mi familia me necesita tanto en este momento que no sé cómo podría encontrar siquiera unos minutos para mí».

Estoy en mi oficina con mi computadora portátil abierta y un ojo en el reloj. Es un sombrío día de primavera afuera, y me resulta aún más difícil encontrar inspiración mirando por la ventana. Tengo este artículo para entregar hoy, y solo tengo tres oraciones escritas. No creo que haya sido una sabia decisión abandonar el artículo a medio escribir el otro día, pero una vez que se me ocurre una idea, es difícil sacarla adelante. Con algo de resignación, tomo otro bocado del pastel relleno de chocolate de una panadería turca. Es delicioso y, al mismo tiempo que el tópico «los turcos son buenos para la repostería», aparece otro pensamiento que se ha convertido en un reflejo profesional: comer bajo estrés es un mecanismo de supervivencia . De hecho, el alivio que estoy tratando de brindar es el mecanismo de afrontamiento .

¿ Qué es un mecanismo de afrontamiento ?

En el libro El mito de la normalidad , Gabor Maté explica el surgimiento de estos mecanismos de afrontamiento como la mejor opción instintiva que tenemos en ese momento. «Las mejores recomendaciones de la naturaleza serían escapar o luchar […] Pero aquí está el problema: ninguna opción es posible para un niño pequeño, porque intentar cualquiera de las dos sería arriesgarse aún más. Por tanto, la Naturaleza recurre al plan C: se reprimen ambos impulsos ignorando las emociones que impulsarían dichas respuestas. Esta supresión parece ser similar a la respuesta de congelamiento que los animales a menudo exhiben cuando pelean o huyen .son imposibles La diferencia crucial es esta: una vez que el halcón se ha ido, la zarigüeya es libre de encontrar su camino, su estrategia de supervivencia es un éxito. Un sistema nervioso traumatizado, por otro lado, nunca llega a descongelarse».

Sabemos que una vez que una persona ha llegado a una determinada conclusión sobre un determinado aspecto de su existencia, especialmente si esto sucedió en la primera infancia, esa persona se apega a esa conclusión tratando de «defenderla» durante toda la vida. Por ejemplo, si en la primera infancia percibimos el mensaje de que no nos quieren (esto, en la mayoría de los casos, sucede sin que los padres se den cuenta de que están enviando ese mensaje), podríamos haber desarrollado la creencia de que algo anda mal con nosotros, que no somos lo suficientemente buenos. Nuestro mecanismo de afrontamiento podría aparecer en forma de un intento constante de demostrar que somos dignos de amor, esto se refleja en un comportamiento mediante el cual tratamos de ser útiles a los demás, complacernos a nosotros mismos,

Mecanismos de afrontamiento: negación

A medida que nos desarrollamos y nos volvemos independientes, descubrimos que algunas de las decisiones que tomamos en el pasado ya no nos sirven hoy. Podemos saber por el dolor que sentimos en nuestras interacciones: no importa cuánta validación externa obtengamos, sentimos que no es suficiente, o tal vez atraemos al mismo tipo de pareja que sin empatía presiona nuestros botones más dolorosos una y otra vez, y seguimos creyendo que nos merecemos todo este sufrimiento. Este proceso en el que sentimos sufrimiento pero nos negamos a ver el mecanismo detrás de estas situaciones se llama negación .

Cuando las conductas derivadas de estas decisiones pierden su utilidad o se vuelven francamente dañinas, sería bueno “desnudarlas”, pero esto no es nada fácil, y muchas veces muchos de nosotros no terminamos haciéndolo. Eso es porque las decisiones se tomaron tan temprano que pensamos que esta «tela» es nuestra piel.

En el libro El drama del niño interior , la psicóloga y filósofa suiza Alice Miller habla de “La depresión como autonegación: La depresión consiste en negar las propias reacciones emocionales. Esta negación comienza como un requisito de adaptación absolutamente imprescindible durante la infancia e indica una lesión extremadamente temprana. Hay muchos niños que, desde el principio, no fueron libres de experimentar los sentimientos más simples, como la insatisfacción, el disgusto, la ira, el dolor e incluso el hambre y, por supuesto, el placer que les provoca su propio cuerpo».

Las tres formas de negación y las viejas decisiones que las subyacen

Abnegación: «No puedo hacer nada con esta situación».

La conclusión que generó el mecanismo de afrontamiento de la abnegación: «No soy ni importante ni poderoso».

Negación de los demás: «No tiene sentido quejarse. Para él (ella) no importará, no hará ningún cambio».

La conclusión que generó el mecanismo de afrontamiento de negar la posibilidad de que otros cambien: «Los demás son rígidos, no pueden cambiar».

Negación de situaciones:  “Veo un rayo cerca, pero aquí no caerá. Seguiré cortando el césped».

La conclusión que generó el mecanismo de afrontamiento de situaciones de negación: «¡No me puede pasar a mí!».

Cuando una persona niega situaciones o niega a otros, también hay una negación intrínseca de sí mismo.

La mayoría de las veces, para negar, distorsionar o ignorar la información, los problemas o las opciones que tenemos, justificamos nuestra actitud exagerando o minimizando la realidad. Esto lo hacemos asociando actitudes que involucran palabras o frases como: «siempre», «nunca», «te lo dije mil veces» o «sin importancia».

Cada vez que te sorprendas usando estas expresiones, te invito a reflexionar sobre la siguiente idea: cuando usas la amplificación o la disminución, estás tratando de eludir la responsabilidad . Pásalo a los demás. La responsabilidad, aunque aparentemente viene con presión, en realidad viene con una sensación de poder. Rollo May define el poder como: «La capacidad de mantener lo que queremos mantener y cambiar lo que queremos cambiar». Cuando estamos en negación, descuidamos la posibilidad de cuidarnos y no evitamos la situación de descuido de nuestros hijos. Entregamos nuestro poder.

Conclusión

En resumen, la negación es un mecanismo de afrontamiento común utilizado para lidiar con situaciones estresantes y dolorosas. Si bien puede ser una forma temporal de protección contra el dolor emocional, si se usa en exceso, puede tener consecuencias negativas en nuestra salud emocional y mental. Identificar y superar la negación puede ser un proceso difícil, pero es importante para nuestra salud y bienestar a largo plazo. Si está luchando con la negación, buscar apoyo y ayuda profesional puede ser beneficioso para superarla y desarrollar estrategias de afrontamiento saludables.

Mi recomendación de lectura para entender la negación